Las inconformidades existentes entre los jugadores por las ventajas que claramente tienen los dueños de equipos en el actual acuerdo colectivo traerá muchos problemas para la firma del siguiente pautado para diciembre de 2021.

Una muestra muy adelantada la acaba de enviar Nelson Montes de Oca, agente del lanzador dominicano Luis Severino, quien reveló que para acordar la extensión del dominicano con los Yanquis, “Pensamos en eso. Esa fue una de las cosas principales que tomamos en cuenta”.

Y eso es lo que predomina en el ambiente de Grandes Ligas, debido a la apatía de los dueños de equipos por firmar a largo a los mejores jugadores, como sucede con el dominicano Manny Machado y Bryce Harper, quienes en febrero siguen sin un equipo para la próxima campaña.

Las cosas se pueden complicar aun más, debido a que el actual comisionado de Grandes Ligas, Rob Manfred, quizás no sea un buen mediador, ya que fue el vicepresidente de relaciones laborales por 15 años. En aquel puesto encabezó las negociaciones que resultaron en los convenios colectivos del 2002, 2006 y 2011.
Manfred ha sido señalado de mala manera, porque la agencia libre ha resultado ser un calvario para los jugadores, algo que antes era una conquista.

Una medida que resultó maligna para los jugadores fue ponerlos a arrastrar una selección del draft al equipo que lo contrate.

El jefe del sindicato Tony Clark tiene mucho trabajo por delante, debido a que el pastel de beneficios de las Grandes Ligas está muy mal dividido, siendo los grandes beneficiarios los dueños de equipos, que cada vez reciben enormes contratos de la televisión.