Los seguidores de las Estrellas Orientales están que no se dan por nadie, en la creencia de que por fin saldrán de la sequía que ya se extiende por más de medio siglo sin poder adjudicarse una corona.
Los resultados positivos que han logrado en el transcurso de la temporada hace que ese optimismo tenga razones lógicas para mantenerse.
Sin embargo, como dice el dicho: “la pelota es redonda y viene en caja cuadrada”, lo que significa que cualquier cosa puede pasar.
En un campeonato donde los equipos varían de un momento a otro, debido a la obtención de refuerzos para el Todos contra Todos, al igual que en la Serie Final, nadie puede asegurar que haya supremacía de un conjunto sobre otro.
Por lo tanto, habrá que esperar hasta el último out para cantar victoria.
La realidad es que más de 50 años sin un título es sencillamente desalentador, por lo que muchos fanáticos de otros equipos están contestes de que ya es hora de que las Estrellas logren una corona, la cual sería la tercera en su largo trajinar.
Lo que muchos no comprenden es cómo un conjunto que ha tenido “verdaderos trabucos”, con peloteros de primer orden, haya permanecido tanto tiempo con una sequía tan extensa de de coronas.
Esperemos unos días para ver si las Estrellas representan al país en la próxima Serie del Caribe, prevista para realizarse en Barquisimeto, Venezuela.
Por cierto, ¿se animarán muchos fanáticos dominicanos y de otros países a emprender el viaje a Venezuela, como está de caliente allí la situación política y económica?
Esa pregunta habrá que dejarla al tiempo, porque “el fanático es fanático” y corre ese y otros riesgos.
