Se fue la luz

Se fue la luz

Se fue la luz

Edilí Arias.

El lunes me despertó más temprano que de costumbre un apagón. Eran las 4:55 de la mañana y pensé que sería algo momentáneo, pero la luz no regresó hasta las 8:15.

Ese apagón retrasó mi trabajo, justo el día en que tenía que laborar de manera remota.

Hace unos días, el Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED) anunció que, de manera transitoria, habría cortes eléctricos en zonas donde se supere el 50 % de las pérdidas causadas por el hurto de energía.

Según informaron, Edeeste es la distribuidora con mayor cantidad de circuitos irregulares.

Cuando leí esa información, pensé que no me afectaría, pues creía vivir en una zona cumplidora con sus pagos, aunque nos quille  con el costo de la factura.

pensé que lo del lunes sería un caso aislado, pero no. Ayer hubo otro apagón y, gracias a eso, me libré de sentarme a hacer la tarea con mi hija de cinco años. Cuando llegó la luz, ya ella estaba dormida.

Volviendo al anuncio del CUED, indicaron que cada cliente afectado recibiría una notificación por mensaje de texto o correo electrónico con la fecha y el horario específico del corte. Yo no recibí nada, y habría sido buena  esa información para organizarme mejor.

Sin embargo, debo reconocer que han cumplido con lo prometido, los cortes no han superado las tres horas, como mencionaron.

Aunque no es lo que quiero que pase, al menos agradezco al Dios todo poderoso que no sean más extensos.

Sobre la duración de esta medida, dijeron que se aplicará hasta que los circuitos mejoren.

Mientras escribo esto, me asalta una duda: ¿debí, como en mi infancia, hacer la tarea con mi hija en modo romance  a la luz de las velas? Quizá, tal vez, a lo mejor  esas hubiera sido el lado positivo de esta situación.

Por ahora, solo queda esperar que las soluciones  a ver si tenemos luz al final del túnel.



Edilí Arias

Edilí Arias, periodista. Especialista en temas de salud.