En su boletín de las 6-30 de la tarde hora local (10.30 GMT), el NHC indica que se espera que el centro de Andrea permanezca al suroeste o al sur de las Bermudas durante el martes o los dos próximos días.
Miami.– Un sistema de baja presión que ayer en la tarde se encontraba entre las Bahamas y la isla de Bermuda se ha convertido en la tormenta subtropical Andrea, con una velocidad de traslación en sentido norte de 14 millas por hora (22 km/h), de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés).
En su boletín de las 6-30 de la tarde hora local (10.30 GMT), el NHC indica que se espera que el centro de Andrea permanezca al suroeste o al sur de las Bermudas durante el martes o los dos próximos días.
Los datos de un avión de “cazahuracanes” de la Reserva de la Fuerza Aérea estadounidense indican que los vientos máximos sostenidos son cerca de 40 mph (65 km/h), con ráfagas de mayor fuerza.
Aunque un ligero fortalecimiento es posible durante la noche, el debilitamiento de Andrea debe comenzar el martes por la noche y se espera que este organismo se disipe en miércoles.
El NHC, que precisamente esta semana anunciará sus pronósticos para la temporada 2019, había informado este lunes en un comunicado a primera hora de la posibilidad de esta tormenta tropical o subtropical que tendría escasa duración.
En la medida en que el sistema de bajas presiones avanzara hacia el norte o el noreste se produciría la formación de Andrea, dijo el NHC, con sede en Miami. Sin embargo, las condiciones meteorológicas del miércoles serán poco favorables para que la tormenta se desarrolle más y acabará siendo absorbida por un frente frío.
Andrea se convirtió en la primera tormenta subtropical de la temporada en el Atlántico, que oficialmente no comienza hasta el 1 de junio.
En la temporada de 2018 se formó otra tormenta, “Alberto”, unos días antes del comienzo oficial de la temporada. “Alberto”, una tormenta subtropical, lo que significa que es un híbrido entre las tormentas de núcleo frío (invierno) y las de núcleo caliente (verano), descargó fuertes lluvias en Cuba y Florida (EE.UU.), antes de tocar tierra en este estado el 28 de mayo de 2018.
Según el pronóstico anual de la Universidad Estatal de Colorado (CSU), difundido el pasado 4 de abril, la temporada de huracanes 2019 en la cuenca del Atlántico tendrá una actividad “ligeramente por debajo del promedio” debido al bajo impacto del fenómeno meteorológico de El Niño en el Pacífico.
Según el informe, si esa situación persiste, como se anticipa, habrá menos posibilidades de que se formen huracanes, por el impacto de El Niño en los vientos del Caribe.
Dicho de otro modo, “habrá menos combustible para la formación de ciclones tropicales y para la intensificación de esos ciclones”, debido a que la atmósfera estará más estable y más seca, precisó entonces Philip J. Klotzbach, jefe de investigaciones del Departamento de Ciencias Atmosféricas de CSU.
De esta forma se anticipan trece tormentas con nombre entre el 1 de junio y el 30 de noviembre, con cinco huracanes, dos de ellos con vientos sostenidos de unos 180 kilómetros por hora, es decir, categoría 3 en la escala de Saffir/Simpson de un máximo de cinco.