San Cristóbal.- Metano y etileno los gases que provocaron la explosión ocurrida el pasado lunes 14 de agosto en la provincia de San Cristóbal y que hasta el momento tiene un saldo de 34 muertos y 60 heridos, según el informe preliminar del Cuerpo de Bomberos.

El documento detalla que él epicentro del siniestro fue en la calle Padre Ayala casi esquina Jacinto J. Peinado, donde funcionaba la empresa Vidal Plast y en el mismo se centraron elementos que apuntan a la emanación de gases combustibles.

“En el área donde la empresa almacenaba y realizaba reciclaje de plástico se encontraron elementos que apuntan a la emanación de gases combustibles que se pueden generar por el calentamiento de dichos materiales, los cuales al estar encerrados y no poder ventilar creando una significativa acumulación en el tiempo, los cuales pueden provocar un incendio o una explosión como la sucedida. Gases que se pueden generar por el sobre calentamiento del plástico son metano y etileno, estos son inflamables”, dice el informe.

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El informe destacó que el pasado mes de marzo del presente año, el ese local se generó un siniestro el cual quedó registrado por el Cuerpo de Bomberos de la provincia, en el mismo se reportó el hallazgo de un producto llamado Peróxido Orgánico 5,2 que requiere ser almacenado a temperatura menor a 20 grados Celsius y demás este tipo de químico tiene reactividad a la humedad, a los cambios de temperaturas y a las chispas.

Tras el evento de marzo, las autoridades informaron a los propietarios de la empresa recicladora de plásticos que debían retirar el mismo, pues no podían estar almacenados en un lugar y condiciones, lo que evidentemente fue ignorado.

Incendio de marzo 

“Destacamos que en el mes de Marzo de este año en este local se generó un siniestro (generación de vapores) el cual está registrado en nuestros en nuestros libros, se reportó el hallazgo de un producto llamado Peróxido Orgánico 5,2. Este producto según la guía de respuesta en caso de emergencia 2020, requiere almacenamiento a temperatura menor a 20 grados Celsius. Además este producto tiene reactividad a la humedad, a los cambios de temperaturas y a las chispas. Este producto puede ser: Inflamable, explosivo y puede provocar deflagraciones. Se les indico a los propietarios que deben retirar el mismo, pues no podían estar almacenados en un lugar y condiciones”, apunta el informe preliminar.

El documento concluye, que el evento del pasado 14 de agostos tiene toda la características de una explosión y deflagración de lamas, estos generaron ondas expansivas hacia los laterales y hacia el techo de la estructura, esparciendo partículas incendiadas hacia los edificios contiguos.

“En el lugar se generó una explosión la cual fue seguida por varias deflagraciones generadoras de ondas expansivas que afectaron vehículos y edificios del entorno, generando también gran cantidad de energía calórica (calor) que alcanzó las propiedades que resultaron incendiadas. Lo anterior indica que la cantidad de gases estaban acumulados en el lugar.

“Los monitores de atmosfera (detectores de gases) utilizados post evento no detectaron la presencia de gases inflamables de ninguna índole, esto es normal ya que los mismos son consumidos por el propio fuego desapareciendo su rastro”.