SANTO DOMINGO.- Fumar una hora de hookah es igual a inhalar entre cien y 200 veces el volumen de humo de un cigarrillo tradicional, por lo que los consumidores de ambos productos están expuestos a sufrir los mismos tipos de enfermedades ocasionadas por fumar.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (Food and Drug Adminitration-FDA), establece que el humo de la hookah expone a las personas al producto químico adictivo de la nicotina y señala que estos absorben mayor cantidad de químicos nocivos que se encuentran en el humo del cigarrillo debido a que las sesiones para fumar son más extensas.
Estos y otros daños producidos por la ingesta de humo a través de hookah han motivado que el Ministerio de Salud Pública prohíba el uso de la misma en lugares cerrados bajo techo, públicos y privados.
La resolución también prohibió la venta, obsequio, distribución y promoción de hookah a menores de edad y tampoco se podrá colocar publicidad o promociones en lugares destinados a menores, a menos de 200 metros de distancia de los centros educativos, en eventos o espectáculos dirigidos a menores ni en publicaciones ni juegos destinados a adolescentes.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), ha explicado que mediante el uso de hookah se absorbe veneno cardiovascular debido a que el monóxido de carbono puede ser muy elevado a causa de los grandes volúmenes inhalados