Sao Paulo.- La exmandataria brasileña Dilma Rousseff, destituida en 2016, realizará en los próximos días una gira por España y Estados Unidos, donde está previsto que denuncie la “persecución” sufrida por su padrino político, Luiz Inácio Lula da Silva, preso desde el sábado por corrupción.
Rousseff (2011-2016) ofrecerá el martes una conferencia en la Casa de América de Madrid y el jueves participará en un evento en la Casa de los Abogados, en Barcelona, días después de que el expresidente Lula fuera arrestado en Brasil, según confirmó hoy el Partido de los Trabajadores (PT).
Tras su paso por España, la expresidenta brasileña viajará a Estados Unidos y el día 16 participará en una conferencia en la Universidad de Berkeley.
Un día después lo hará en Stanford y el día 18 en la Universidad de San Diego. Rousseff ha manifestado su pleno apoyo a Lula durante el proceso abierto en su contra y le ha acompañado en sus horas más bajas, como hizo el exmandatario cuando ella fue destituida por el Congreso debido a unas irregularidades en las cuentas públicas.
La expresidenta ha defendido en los últimos días la “integridad» de Lula y ha denunciado una persecución política contra el principal líder de la izquierda en Brasil, preso desde la noche del sábado en la ciudad de Curitiba.
En un comunicado publicado tras el arresto, Rousseff subrayó que Lula es “inocente” y se ha convertido en un “preso político” tras su detención.
La prisión contra Lula fue decretada el jueves por el juez federal Sergio Moro, pero su encarcelamiento tan solo se produjo el sábado, después de 48 horas de resistencia junta a la militancia en el sindicato de Sao Bernardo do Campo.
La defensa de Lula se encuentra inmersa en una batalla jurídica para librar de la prisión al expresidente, mientras centenas de simpatizantes acampan a las puertas de la Policía Federal de Curitiba para demandar su libertad.
A pesar del encarcelamiento, el Partido de los Trabajadores (PT) continúa defendiendo la candidatura del exsindicalista (2003-2010), líder en todas las encuestas de intención de voto de cara a las elecciones presidenciales del próximo octubre.
El partido reunirá hoy a su directiva nacional en Curitiba para evaluar la situación después de la prisión de su principal referente.
Lula fue condenado en julio de 2017 por el juez Sergio Moro a nueve años y seis meses de prisión, una pena que fue aumentada a doce años y un mes el pasado 24 de enero por un tribunal de segunda instancia.
La Justicia dio por probado que Lula favoreció a la constructora OAS en contratos con la petrolera estatal Petrobras y que la empresa lo recompensó con un apartamento en un balneario del estado de Sao Paulo.