Santiago.– Lo que debió ser un Día de Navidad marcado por la celebración y el encuentro familiar se transformó en una emergencia colectiva para los residentes de La Zanja, en el municipio Sabana Iglesia, tras la rotura de una tubería de aducción del acueducto Cibao Central, una infraestructura clave para el suministro de agua potable en la región Norte.
Desde el incidente, ocurrido el pasado 25 de diciembre, más de 800 mil personas permanecen afectadas por la falta de agua, debido a la salida de operación de los acueductos Cibao Central y Dura-Moca, que abastecen amplios sectores de Santiago, Tamboril, Puñal, Licey al Medio, Villa González y Moca.
Durante este domingo, brigadas técnicas de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan), junto a contratistas privados, continuaban los trabajos de reparación de la tubería, construida hace varias décadas y considerada obsoleta para la demanda actual.

El director de Acueductos de Coraasan, Elwin Rodríguez, explicó que aunque las labores se realizan las 24 horas, todavía no existe una fecha definida para el restablecimiento del servicio de agua potable.
“Se ha trabajado de manera ininterrumpida desde que ocurrió el incidente, que además provocó la destrucción de varias viviendas”, señaló el funcionario.
Rodríguez detalló que en la reparación participan varias instituciones, entre ellas el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa), la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), la empresa Acero Estrella y los Comedores Económicos del Estado, en labores de apoyo comunitario.

Indicó que ya fue colocada una nueva tubería de acero y que los técnicos se encontraban en el proceso de soldadura y acoplamiento, una fase que podría concluir este domingo. No obstante, aclaró que el suministro de agua no se reanudará de inmediato.
“Luego de eso viene el proceso de anclaje y vaciado de la tubería, lo que permitirá determinar con mayor precisión el tiempo total de la obra”, explicó.
Rodríguez subrayó que se trata de una intervención compleja, debido a que la tubería afectada fue instalada en 1994 y nunca antes había sido sometida a una reparación de esta magnitud.
“No tenemos una hora ni un tiempo establecido, porque en el camino van surgiendo inconvenientes propios de una infraestructura tan antigua”, puntualizó.

Crónica de una emergencia anunciada
Para los comunitarios de La Zanja, la rotura de la tubería no fue un hecho inesperado. Según denuncian, desde hace más de ocho meses venían alertando sobre el deterioro del sistema.
El presidente de la Junta de Vecinos, Mario José Díaz, afirmó que en ese tramo de la tubería existían al menos cinco fugas, una de ellas incluso dentro de una vivienda que resultó afectada.
“Desde el 15 de diciembre advertimos que eso iba a colapsar. Dijimos que no pasaba de enero, pero nadie hizo nada y ahora estamos pagando las consecuencias”, expresó.
Lea también: Rotura de tubería en acueducto Cibao Central deja a más de 800,000 personas sin agua
La situación ha agravado el desabastecimiento en varios sectores. Un residente identificado solo como Eddy denunció que, pese al anuncio del envío de camiones cisterna, estos no habían llegado a la comunidad al momento de la visita de reporteros del Periódico El Día.

Por su parte, Agripino Polanco, también residente de la zona, aseguró que en sectores como Licey al Medio la escasez es tal que incluso se dificulta encontrar botellones de agua potable en los comercios.
Mientras avanzan los trabajos técnicos, comunidades enteras del Cibao Central permanecen en vilo, a la espera de una solución definitiva a una crisis que, según denuncian los residentes, pudo haberse evitado.
Las familias afectadas han recibido enseres del hogar tras el daño que recibieron sus viviendas al colapsar ese sistema hídrico y que según fuentes oficiales impacto ocho hogares, sin daños humanos que lamentar.

Etiquetas
Yamer Javier
Periodista especializada en la fuente de salud. Máster en Comunicación Estratégica y Relaciones Públicas,