San Diego Padres closer Fernando Rodney fires his imaginary arrow after closing out the Padres' 2-1 victory over the Colorado Rockies in a baseball game Monday, May 2, 2016, in San Diego. (AP Photo/Lenny Ignelzi)
San Diego, California.-El resurgir del cerrador dominicano Fernando Rodney en esta campaña es considerado por muchos como un milagro de Dios y mucho más al verlo participar en el Juego de las Estrellas. “Es que nadie puede acabar con la flecha”, proclamó Rodney.
En la campaña anterior Rodney lucía totalmente perdido, hasta el punto de que perdió su trabajo como cerrador en Seattle, que posteriormente lo licenció y terminó firmando un contrato de ligas menores con los Cachorros de Chicago, sin crear ningún efecto.
“Realmente tuve un año muy difícil en Seattle, pero el sacrificio, la dedicación en el terreno y la disciplina es lo que me ha ayudado a recuperarme, luego de que toqué fondo el año pasado”, manifestó Rodney al ser entrevistado por EL DÍA en el estadio Petco Park de San Diego.
Este año Rodney firmó un contrato de ligas menores con los Padres de San Diego, logrando hacer el equipo grande en los entrenamiento para luego materializar un resurgir tan milagroso que no permitió carrera limpia hasta el 21 de junio, cuando los Orioles de Baltimore le anotaron una.
Con los Padres logró 17 salvamentos consecutivos, con efectividad de 0.31 en 28 juegos. “La diferencia con el año pasado fue que en Seattle perdí la confianza.
Cuando me siento así no puedo responder mi propia pregunta. No me sentía bien, mi cuerpo ni mi mente respondían como se requiere, pero ya superé eso y me siento muy bien”, explicó Rodney.
Añadió que por esa razón lanzó con el Escogido en el invierno pasado para recuperar la confianza que había perdido. Añadió estar muy contento por esa recuperación que lo trajo hasta el Juego de las Estrellas.
“Estoy muy alegre porque precisamente el juego fue en el estadio de San Diego frente a los fanáticos que me vieron recuperar”, dijo el cerrador, quien asegura estar comprometido ayudar a los Marlins en su propósito de alcanzar la postemporada.