Robot mediador actuando como conciliador resuelve el primer caso judicial

Robot mediador actuando como conciliador resuelve el primer caso judicial

Robot mediador actuando como conciliador resuelve el primer caso judicial

Alexis Peña Céspedes.

El primer caso de mediación vía inteligencia artificial. A todos nos ha llamado poderosamente la atención que un robot diseñado por una persona especializada en software no en Métodos Alternos de Resolución de Conflictos (MARCs), sea el que interceda como tercero imparcial en un conflicto generado por personas, es decir, las partes.

Hurgando en la internet encontré la solución de lo que se podría denominar primer conflicto solucionado por la inteligencia artificial el 19 de febrero de 2019,  en un artículo difundido por Legal Fatures, en donde señala que Nick Hilbone en una máquina robot actuando como tercero imparcial o de mediador, había logrado un acuerdo en donde se piensa que ese podría ser el primer caso mediado en un Centro de Mediación, aunque la persona que relata el hecho, dice que fue en un juzgado (tribunal). Pero lo que ocurrió realmente fue una conciliación, ya que la máquina robot les propuso a las partes las posibles soluciones.

Indica que la herramienta online utilizó algoritmo y que a través del mismo, las partes intervinientes arribaron a un “acuerdo” en menos de una hora vía el robot, sin embargo, si fuera realizado por una persona juzgadora,  por lo menos se requeriría unos 3 meses, para una posible solución judicial.

Recordar, las emociones y sentimientos son muy importantes en el diálogo entre las personas, siempre y cuando se realice un proceso de mediación.

La historia del caso la narró el experto en ODR, Graham Ross, quien dijo que la controversia conciliada no Mediación “…era sobre una reclamación de cerca de dos mil libras esterlinas solicitadas por un entrenador a un cliente por cursos personales”.

Narra que “Para resolver la reclamación las partes usaron un servicio online del juzgado en el cual no lograron un acuerdo y después se les proclamó una audiencia”, por lo que se nota que un tribunal estaba apoderado del caso vía sus representantes legales y por la narración del caso, parece que se intentó llegar a un acuerdo amigable antes de acudir al método adversarial.

Es así agotando el procedimiento del método adversarial, es decir, el tribunal, es que el Ross les sugiere a las partes en conflictos utilizar “Smartsettle ONE”, el cual fue impulsado in British Columbia por ICan Systems, facilitado por su inventor y presidente, el doctor Ernest Thiessen.

Las personas en conflicto según narra, utilizaron “un sistema de ofertas y contraofertas que se identifican con banderas de colores verde y amarillo”, además recalca que “Usando algoritmos, el robot aprende las tácticas de las ofertas de las partes y las ayuda a lograr un acuerdo sin revelar sus propuestas concretas”. Lo que en una mediación presencial con las partes y la persona mediadora, es imprescindible que las personas participantes en la mediación planteen sus opciones, intereses y propuestas para ser consideradas para un posible acuerdo.

Continúa planteando que el sistema ante citado realiza esa operación dizque “…para evitarles a las partes enviar una propuesta que no va a ser aceptada por la otra”,  por lo que entiendo ilógico e irracional que las partes sin su consentimiento y sin una propuesta consensuada por ellos tengan que aceptar lo que le ha sugerido el robot “mediador-a”. La persona que narra este primer caso de mediación vía la inteligencia artificial, Ross destacó que si usted está interesado en conocer un poco más sobre este y otros casos, o mejor dicho,  entrenarse para manejar el Smartsettle ONE puede asistirse en odrtraining.com.

Algunos párrafos del artículo en inglés traducido al español, destaca lo siguiente; que “Se ha utilizado un «mediador robot» para resolver una disputa en el sistema judicial, por lo que se cree que es la primera vez”.

Dice que “La herramienta en línea, que utiliza algoritmos de inteligencia artificial (IA) en lugar de un mediador humano, resolvió la disputa de tres meses en menos de una hora”.

Sobre el autor, el artículo destaca que “Graham Ross, mediador y experto en resolución de disputas en línea, dijo que el avance se produjo cuando presentó a dos litigantes del sistema de reclamos de dinero civil en línea del gobierno a la herramienta canadiense de resolución de disputas Smartsettle ONE”.

Subrayando que “El Sr. Ross le dijo a Legal Futures que la disputa se refería a alrededor de £ 2,000 en honorarios impagos reclamados por un entrenador a un cliente que seguía un curso de asesoramiento personal”.

Una cualidad a destacar es que “A pesar de un intento de mediación telefónica con un funcionario judicial, no lograron resolver su caso y se fijó una fecha para la audiencia”.

 “Una de las partes conocía mi trabajo y había estado trabajando con el equipo de Smartsettle. Hice los arreglos para que ambas partes lo usaran y lo hicieron”.

Por último Ross agregó: “Los mediadores pueden quejarse de que esto los hará quebrar. no lo hará Es una herramienta para mejorar las posibilidades de que las partes lleguen a un acuerdo”. Lea el artículo completo versión inglés en https://www.legalfutures.co.uk/latest-news/robot-mediator-settles-first-ever-court-case

Además, les recomiendo leer el artículo de investigación de Jorge Luis Ordelin Font, publicado el 20 de febrero de 2020, quien fuera becario postdoctoral en el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Ordelin Font dice “Las partes decidieron utilizar el sistema de tribunal de reclamos de dinero en línea luego de un intento fallido de mediación telefónica y de una audiencia. Adoptaron el acuerdo a partir de la utilización de un sistema de ofertas y con­traofertas que se identificaba con banderas de colores verde y amarillo como fuente de conocimiento”.

Sobre la en China explica que “…un juez basado en tecnologías inteligentes ayudará a completar el trabajo que se considera básico y repetitivo, como la recepción de litigios. Se prevé que el sistema, dotado con imagen, voz y expresiones faciales femeni­nas realice acciones basadas en una persona real. Entre estas se encuentran: la ayuda a los usuarios a utilizar la plataforma de litigios en línea, la relación de comunicaciones inteligentes de preguntas y respuestas con estos, basadas en datos del conocimiento profesional y la orientación de jueces”.

Explica que “De forma similar en Estonia el Ministerio de Justicia ha pedido que se dise­ñe un “juez robot” que pueda resolver disputas de reclamos menores de €7,000, con el fin de eliminar la acumulación de casos pendientes. Centrado en la re­solución de disputas contractuales se prevé que las partes puedan cargar docu­mentos e información relevante para que el sistema pueda emitir una decisión que pueda ser apelada ante un juez humano”.  https://www.scielo.org.mx/pdf/rius/v15n48/1870-2147-rius-15-48-357.pdf



Alexis Rafael Peña Céspedes

Periodista, abogado y mediador certificado.