SANTO DOMINGO.-La reventa de servicios de internet por parte de terceros no autorizados representa pérdidas millonarias para las compañías de telecomunicaciones y para el Estado, debido a que no se aplican los impuestos correspondientes al consumidor final que es de un 30%, y además, esa práctica ilegal afecta la calidad de los usuarios que han adquirido el servicio de manera legítima.
La Asociación de Empresas de Comunicación y Tecnología (Comtec), precisó que los incrementos en los costos para las prestadoras son de millones de pesos mensualmente, sin contar con la inversión de recursos materiales y de recursos humanos que deben desplegar para atender las incidencias presentadas.
“Se ha podido verificar que la mayor concentración de la actividad comercial de estos revendedores irregulares de internet se da con la contratación de servicios residenciales ofrecidas en zonas perfectamente servidas por las distintas prestadoras de servicio.
Aquí lo que ocurre es que estos terceros, desde la ilegalidad, hacen uso indebido y comercial de los servicios personales contratados, cobrando a los usuarios por servicios sin poder cumplir con las medidas de calidad, seguridad y servicio al cliente mandadas por la reglamentación vigente”, explicó Comtec a El Día.
Señaló que han denunciado esa situación al Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (Indotel) desde hace mucho tiempo y que adicional a esso, para salvaguardar la integridad de las redes y la calidad del servicio a sus clientes, las prestadoras, de conformidad con las leyes y contratos aplicables, desconectan a esos revendedores no autorizados.