Santo Domingo.-El retraso del desarrollo económico de la región Sur permitió la penetración de la red criminal desmantelada mediante la Operación Caimán, dedicada al narcotráfico, con el que obtenía altas cantidades de dinero al punto movilizar la “narcoeconomía” de la región que propició el ascenso de familias y la comunidad.
Así lo refiere el Ministerio Público en la solicitud de coerción, en la que pide 18 meses de prisión para diez imputados de caso Caimán, a quienes se les atribuye asociación de malhechores, tráfico de drogas, violación de la ley de armas, lavado de activos y otros delitos.
En el documento se indica que la falta de oportunidades provocó la proliferación de los clanes dedicados al narcotráfico, que generan miles de millones de dólares a favor de las inversiones en narcóticos por parte de los grandes narcotraficantes denominados “capos de las drogas”.
Las narcofamilias, como los Florián, Gloria, Cuevas, Féliz, y otras, mantenían el control en el tráfico de drogas en la región Sur, específicamente en las provincias Peravia, Barahona, Pedernales y Azua.
Esto, de acuerdo con el Ministerio Público, dio lugar a la “narco cultura” poblacional de la región Sur, que hace que estos delitos se perciban como una actividad económica y comercial común. Por allí se habla de los “lancheros”, que ingresan a la costa con embarcaciones de narcóticos, y los llamados “Playeros”, que adquieren armas como pago por recibir un cargamento.
Esta situación ha generado enfrentamientos con resultados de algunos heridos.
En el documento el Ministerio Público establece que esos grupos, que mantiene el control de la región Sur se mantienen en el área costera a la espera de que ingresen lanchas con los cargamentos de narcóticos, y penetran al mar en embarcaciones con armas largas para realizar los llamados tumbes (robo del ilícito que se transporta).
Los tumbes son vendidos al mismo precio del mercado de las drogas ilícitas, situación que conlleva conflictos que tienen como resultado secuestros y asesinatos para recuperar los narcóticos.
Las seis narcos familias que integran las estructuras de criminalidad organizada del caso Caimán se dedicaban a la transportación, logística, organización y ejecución de operaciones de narcotráfico transnacional vía marítima.
Movilizaron por separado 28.8 toneladas de cocaína por año, por un valor aproximado de US$32,000,000.
Las estructuras criminales integradas por los linajes referidos, específicamente las dirigidas por la imputada Gloria Elena Cuevas junto a los de los implicados Elson Cuevas y Carlos Cuevas, ejecutaron acciones de narcotráfico desde las costas de Barahona hasta Pedernales y luego en la vía terrestre con el objetivo de ocultar los cargamentos de la sustancia ilícita en sus domicilios y almacenes clandestinos.
Operativos
— Evidencias
El Ministerio Público durante allanamientos los implicados en el caso Caimán, les ocuparon armas ilegales como pistolas y escopetas vehículos, drones, embarcaciones, brújulas, GPS y otras pruebas.
Hoy coerción miembros de las “narcofamilias”
Proceso. Un juez de la Oficina de Atención Permanente de Barahona conocerá hoy la solicitud de medida de coerción contra diez personas vinculadas a la estructura criminal de narcotráfico transnacional, impactada en la fase II de la Operación Caimán.
El Ministerio Público solicita 18 meses de prisión a Malbin Martínez Féliz, Gloria Elena Cuevas, Geise Féliz Pérez, Wilkin Joel Cuevas Ferreras, Wilmer Cuevas Florián, Wellington Ford Garó, Jerbinson Bernabé López, Máximo Ruiz Moreta, Carlos Manuel Cuevas Pérez y Rafael Saldaña Cuevas, y que se declare complejo.