Residentes donde cayó viga habían pedido día antes desalojo a Opret

Santo Domingo.-“Yo dije, ay Dios mío, que desastroso lo que está pasando, Señor”, fueron algunas de las expresiones usadas por Maribel del Rosario Heredia, de 42 años, para explicar los momentos de tensión que se vivieron ayer en el barrio Ricardo Carty de Gualey, tras derrumbarse una viga de varillas de las que se levantan para la extensión de la segunda línea del Metro.

Tras el accidente Virginia Castillo, de 23 años, sufrió heridas en la cabeza y un trauma en el hombro izquierdo, mientras que su niña recién nacida afortunadamente solo reaccionó conmocionada por el impacto. Ambas están fuera de peligro, según indicaron médicos del hospital Luis E. Aybar (Morgan), donde fueron trasladadas.

La viga de más de 20 metros de largo cayó sobre varias casas que están ubicadas debajo del puente Francisco del Rosario Sánchez (de La 17), incluida la de Castillo.

Precisamente antes de ayer los residentes de esa zona se reunieron con técnicos de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret) para que los sacaran del lugar, ya que las vibraciones de las maquinarias los estaban afectando día y noche.

“Ellos agarraron y vinieron, nos hicieron un bultico, que sí, que nos van a desalojar, y agarraron y se fueron. Mira hoy lo que pasó”, expresó indignada una de las jóvenes del barrio. Luego del incidente los moradores apedrearon las maquinarias de la Opret.

Organismo auxiliará a los heridos

Luego de ocurrir el accidente con la caída de la viga, el subdirector de la Opret, Leonel Carrasco, se reunió con una representación de los moradores del sector de Gualey y prometió que ese organismo iba a cubrir los gastos de las personas heridas.

Los residentes de las barriadas cercanas a la construcción de la Segunda Línea del Metro de Santo Domingo reclaman ser reubicadas en lugares seguros, más ahora de lo ocurrido con un saldo de una mujer embarazada, un niño y un hombre con lesiones.

El hecho ocurrió a las primeras horas de este miércoles.