Aún no se ha encontrado una cura contra el COVID-19.
SANTO DOMINGO.-El comportamiento del COVID-19 en el país se ha volcado a un nivel de mayor agresividad reflejando un repunte en los contagios, las hospitalizaciones, los casos críticos y los fallecimientos.
Al corte de las seis de la tarde del ayer unas 704 personas estaban hospitalizadas a causa de la enfermedad, dicha cifra representa una ocupación del 46% de la capacidad de atención nacional para COVID-19, mientras que los días anteriores era de un 37%.
En tanto que los casos críticos se elevaron ligeramente, pasado de una ocupación en las Unidades de Cuidados Intensivos de 36% de unas 330 camas, a 42%, ya que hasta ayer había 145 pacientes ingresados. En ventilación permanecían 56 personas.
La cantidad fallecidos nuevos es de 13, tres de las cuales ocurrieron en La Vega, dos en el Distrito Nacional, dos en Santo Domingo y una en Azua, Barahona, Hermanas Mirabal, San Pedro de Macorís, Santiago y Monseñor Nouel.
En la acostumbrada rueda de prensa el ministro de Salud Pública, Rafael Sánchez Cárdenas, hizo un llamado a la población en general para que respeten las medidas de protección contra el virus, debido al aumento en el flujo de vehículos hacia el interior del país.
Dijo que en los pueblos se están reportando conglomerados de personas con poca medias de prevención e irrespetando el distanciamiento, poniendo en riesgo la salud de los familiares en localidades vulnerables.
Como consecuencia advirtió que propondrá al poder ejecutivo el endurecimiento del uso de las mascarillas con penalidades por su falta.
“Sin la participación ciudadana el COVID continuará y se extender, por tanto todos deben de colaborar para cortar su transmisión, lo cual es necesario para continuar con el desenvolviendo económico y social del país”, manifestó.
