República Dominicana y China en medio de la Guerra Comercial con EEUU

República Dominicana y China en medio de la Guerra Comercial con EEUU

República Dominicana y China en medio de la Guerra Comercial con EEUU

José M. Félix, economista

Recibimos hoy con gran beneplácito la gran noticia del inicio de las relaciones diplomáticas y comerciales con la Republica popular China y  al mismo tiempo el anuncio de la finalización de las relaciones  con la Republica de Taiwán, que desde hace 72 años sostenían ambos países y de la cual la Rep. Dominicana recibió ciertas ventajas.

Fue una decisión audaz, astuta y soberana con varios meses cocinándose, pero que podría causar que la gran potencia del norte, que viene sosteniendo una rivalidad en el plano económico y político con China, se enojase.  Hasta el presente las relaciones que el coloso oriental ha sostenido con las naciones de la región, con las que comparte relaciones diplomáticas, se han limitado al plano económico y comercial, por lo menos así ha sido hasta ahora, aunque sabemos que a largo plazo China se prepara para una expansión total para el año 2025. Y aquí debemos ser muy cautelosos puesto que este anuncio se hace en el momento en que las relaciones entre los EEUU y China entran en una fase de escalonamiento en las sanciones impuestas por EEUU, que pudiera desembocar en una guerra comercial de consecuencias muy perjudiciales para el comercio mundial.

La nueva “ruta de la seda”, que abarcaría más de 60 países junto con el programa “Hecho en China 2025”, del presidente Xi Jinping, que busca convertir a China en un gigante tecnológico en areas especificas como las comunicaciones, la inteligencia artificial, la robótica y la industria farmacéutica, están en el centro de la guerra comercial que los EEUU han iniciado contra la Republica popular China.

Estados Unidos considera este programa como una peligrosa amenaza a su dominio económico y militar.  Así lo ha dicho y repetido en varias ocasiones Peter Navarro, el asesor comercial de Donald Trump: “Si ellos básicamente se apoderan de ese terreno tecnológico robándonos, no tendremos un futuro como país en términos de nuestra economía y nuestra seguridad nacional», más claro…ni el agua!

Estados Unidos mantiene un déficit comercial con China cercano a los US$375,000 millones   anuales y creciendo. La subida de aranceles a las importaciones de Acero y Aluminio alcanzarían los US$50,000 millones, aunque los EEUU pretenden llegar a los US$150,000 millones en aranceles sobre productos chinos.  Los chinos por su parte han amenazado con imponer sanciones parecidas a un grupo importante de productos norteamericanos llegando inclusive a considerar la venta de varios miles de millones de bonos del gobierno de EEUU, lo que causaría una grave inundación de esa moneda a nivel mundial. Si a esto se le suman las tensiones de guerra que existen en varios puntos del planeta en las cuales se encuentran enfrentadas ambas potencias, entonces diríamos que “el horno está como para galletitas…”.

Es un problema geopolítico de gran envergadura que se hace presente en todo el globo y del cual no escapa la región Latinoamericana y el Caribe y cuyas proyecciones a nivel político resultan cada día más evidentes. Las amenazas proteccionistas del gobierno norteamericano preocupan a la Unión Europea que ha buscado una alianza con China y que sorprendentemente han hecho que el presidente Trump haya mandado a revisar nuevamente el acuerdo TPP, cuando todos recordamos que su primer decreto fue precisamente la separación de EEUU de este TLC.

Entendemos que fundamentalmente con este paso el gobierno de Danilo Medina persigue abrirle puertas a las cuantiosas inversiones que el gigante Asiático pudiera traer al país y sobre todo lograr conquistar una parte importante del mercado de turistas chinos que hasta el día de hoy ronda los 135 millones al año. Sin embargo este panorama que hemos descrito no debe de ser perdido de vista y actuar con mucha precaución.

La República Dominicana se ubica dentro de la zona de influencia de los EEUU por lo que consideramos que previamente este cambio de política tuvo que ser consultado y debatido con la embajada norteamericana en el país y en caso de que no hubiese sido así tendremos que coincidir forzosamente con el comentario hechos por el profesor Andrei Sidorov a la agencia Rusa Sputnik de que: “Esto significa que el dominio indivisible de EEUU en la región ya no es tan inquebrantable como solía ser” y agregó “Por lo tanto, para la Republica Dominicana, es un paso audaz e incluso REVOLUCIONARIO” (mayúsculas nuestras jmf).

Este trascendental acontecimiento es sin lugar a dudas el de mayor relevancia en toda la historia de comercio exterior del país en muchas décadas, y cuyas repercusiones se harán sentir en todos los ámbitos de la vida nacional.  En lo inmediato se reflejará en lo económico y lo comercial, en el largo plazo será en lo político, lo ideológico y lo social.

Un antiguo proverbio chino reza: “Si construyes el nido del águila, el águila vendrá”. El nido que ahora se construye aquí es para que las águilas chinas vengan. ¡Bienvenida a tu nuevo nido hermana República popular China!