Huelva.- El ‘Oso de Plata’ conseguido este año por el cine dominicano en el Festival de Cine de Berlín con ‘Pepe’ refleja el buen momento que vive el celuloide en el país caribeño, donde también hay un auge de la mujer en la producción, clave para el nacimiento y desarrollo de una película.
La película de Nelson Carlo de los Santos Arias que triunfó en el festival alemán está producida por Pablo Lozano y Tanya Vallete, la primera mujer en dirigir la Escuela Internacional de Cine y Televisión de la ciudad cubana de San Antonio de los Baños, y, como ella, siguen aumentando los ejemplos la presencia femenina en puestos de responsabilidad en el sector.
Uno de los nombres más llamativos es Minervas Producciones, que nace para promover la participación femenina en las artes, especialmente el cine, con Violeta Lockhart, Alexandra Santana y Virginia Antares al frente, responsables de obras como el documental ‘Aquí Estamos’, referencia del cine reivindicativo.
La cinta muestra cómo unos jóvenes activistas desafiaron al poder y, con una candidatura ciudadana, ganaron unas elecciones con menos del 10 % de la inversión de sus rivales. “Un cine cada vez más empoderado”.
Según explicó Santana a EFE, es una gran noticia “saber que el cine está empoderado por mujeres”, en un país en el que la producción cinematográfica “está en su mejor momento”, con el “empuje a la internacionalización” que ha supuesto el éxito en la Berlinale.
Alexandra Santana muestra su trabajo en estos días en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, en el sur de España, a donde llegó con el ‘Programa Residencia de Cine’, destinado a desarrollar proyectde Huelva como nexo.
La productora no obvia algunas “amenazas” que se ciernen sobre el sector, como la propuesta del Gobierno de eliminar los incentivos fiscales de la Ley de Cine aprobada en 2010, que supuso el gran revulsivo para los rodajes en República Dominicana, idea avanzada en octubre por el ministro de Hacienda, Jochi Vicente, e inicialmente justificada en que “se han cumplido sus objetivos” de relanzar el sector.
Alexandra Santana no oculta que los cineastas están más que preocupados, “por la amenaza de la eliminación del incentivo fiscal”, pero confía en que el Gobierno sea “consciente de que la cultura hay que priorizarla”, y está esperanzada en que “hay cine para rato”.
Reflexiona también sobre la presencia de mujeres en la industria, desde oficinas donde se consigue todo para que los rodajes sean efectivos.
El reto de tener más directoras
“Somos cada vez más, aunque también hay oportunidades de mejora, porque no tenemos tantas mujeres dirigiendo como quizás quisiéramos, pero se ha visto un cambio en los últimos años”, dice la productora caribeña, que pone como ejemplo su propia firma, en la que “parte del trabajo que se realiza es precisamente ese, identificar a estos nuevos talentos”, y poder apoyar “esas historias hechas por mujeres y sacar adelante sus proyectos”.
lgunas de esas ideas se desarrollan en Huelva en estos días, como ‘La Voz Dominicana’, de la propia Santana y Claudia Saviñón; ‘De Qué Hablamos Cuando Hablamos de Lipo…’, de Mariú Benzo, e ‘Historias de Autobús’, de América Almodóvar.
Juntos, cineastas latinoamericanos y organismos españoles trabajan en “una perspectiva de la narrativa de guion que se quiere contar, y en madurar la idea”, y poco a poco surgen nuevas producciones, al tiempo que las cineastas pelean por otras ideas, otras películas en ciernes, sin olvidar el potencial que desde su país a España, y viceversa, se tiene cuando se trabaja unidos y se consiguen coproducciones con financiación a ambos lados del Atlántico.