SANTO DOMINGO.-Sebastián Kahuna es un actor y empresario canadiense que lleva unos años radicado en República Dominicana. Todo empezó con su amor por las playas de este país, al cual fue conociendo en cada uno de los viajes que hacía.
Estudio arte en su país natal Canadá, no con el propósito de hacer carrera como actor.
Pero las cosas se fueron dando y hoy es una figura de calibre que va llevando su trabajo al más alto nivel.
En el país ha trabajado en varios proyectos, entre ellos “Santo Domingo”, un documental histórico de Pinky Pintor.
Tiene otras a puntos de salir como son “The I-Land (Netflix Original), The Lemonade, del famoso Director de Hollywood Ethan Manaquis,¨ La Otra Lucha¨, de Hans García, “The App” con Isaac “Panky” Saviñon, entre otras.
Su amor los autos y por el trabajo Paul Walker en “Fast & Furious” lo llevan a soñar lejos y a pensar que no le gustaría que ese legado termine.
¿Cómo llega de Canadá a este país?
Vine en varias ocasiones de vacaciones y me enamoré del país al punto de no querer irme… así me instalé aquí y desarrolle no solo mi carrera como actor, sino como hotelero en Cabarete.
¿Cuál es tu historia antes de llegar al cine?
En Canadá fui a la escuela de artes y estudié audiovisuales, no con el propósito de ser actor, pero como cosa del destino siempre me preguntaban si quería participar en esta o aquella toma, fue inevitable.
¿Cómo se da tu paso al cine, la primera oportunidad como se da?
Lo de actor sucedió de forma casual, cuando ayudando a unos amigos en un proyecto cinematográfico en 1995 me vi involucrado en ese mundo, sin saber que el futuro me traería muchos más proyectos. Fue entonces cuando me apasioné con la idea de presentar una performance en la gran pantalla.
De tu amor por el cine dominicano, ¿qué puedes contar?
Pues yo además de enamorarme de las playas, y del paraíso que es RD, este país es como una gran sonrisa, y así mismo su cine, es divertido y fraterno poder participar en el cine local, la gente te trata como familia, y de hecho formas una familia con los colegas que vas trabajando.
¿Cuál sería el gran paso del cine dominicano para volverse una industria como Hollywood?
Como le he pasado a muchos lugares a través el mundo que se han convertido en ciudades de impacto para la industria, todo empieza con el “deseo” de que suceda.
Hay que querer que la industria cinematográfica sea parte de las prioridades del país. Con eso quiero decir, tener el apoyo de los gobiernos, tener la infraestructura legal para que más producciones internacionales puedan venir a filmarse aquí.
Háblame de la familia, como combina trabajar y darle tiempo a con ellos?
El balance entre el trabajo y la familia no es fácil para nadie.
Eso es algo que hay que manejar siempre sin importar cuál sea tu trabajo. Pero como el cine va de un proyecto al otro, y así como hay meses intensos de filmaciones, hay otros tranquilos, y eso deja mucho tiempo para la familia entre la grabaciones.
Cine
— Piensa
Kahuna entiende que por ahora hay que seguir rodando proyectos enfocado al público al que se vaya a vender. Está a favor de que los filmes de comedia que se hacen en el país sigan con su mismo lenguaje.