La República Dominicana, catalogada como el equipo favorito para ganar la quinta edición del Clásico Mundial, quedó eliminada en la primera ronda del evento que se celebra en la ciudad de Miami.
Los de la tierra de Duarte, Sánchez y Mella, sufrieron su segunda eliminación en la historia de gran evento (2009-2023), siendo otro papelazo mayúsculo para un equipo repleto de jóvenes superestrellas en las Grandes Ligas, como son, Manny Machado, Juan Soto, Rafael Devers, entre otros.
La pobre ejecución y frialdad en momentos claves del juego, le pasó factura a un conjunto que no pudo resistir a la férrea ofensiva de un equipo de Puerto Rico, que logró alzarse con el boleto que los llevó la segunda ronda del torneo que reúne a 20 selecciones de varios países.
Con una rotación liderada por Sandy Alcántara y Cristian Javier, un bullpen envidiable y una toletería que totalizaba 19 premios Bate de Plata, los quisqueyanos eran considerados unánimemente como una de las grandes favoritas para ganar el torneo. Avanzar en el Grupo D, aun con la presencia de Puerto Rico y Venezuela, lucía como una formalidad cuando arrancó la acción en Miami el sábado.
La derrota contra Puerto Rico, en muchos sentidos, fue similar al primer juego ante Venezuela el sábado, en el que tropezaron 5-1. En ese duelo inicial, la potente ofensiva de los quisqueyanos dejó a 13 corredores en base y se fue de 12-0 con corredores en posición anotadora. El miércoles contra el Team Rubio, dieron dos hits en ocho turnos con gente en posición de anotar y se quedaron siete anclados en las almohadillas. Dejando un lado los encuentros contra Israel y Nicaragua, Dominicana hizo tres carreras.
Las islas vecinas han protagonizado la rivalidad más grande del béisbol caribeño y a partir del 2006 con la celebración del primer Clásico Mundial de Béisbol, la misma ha cobrado aún mayor importancia en la máxima vitrina de este deporte con la participación de las estrellas de Grandes Ligas.
En la historia de los Clásicos Mundiales, los quisqueyanos han ganado tres de los cinco enfrentamientos ante los boricuas. En el 2006, Puerto Rico se impuso por 7-1 en la segunda ronda realizada en San Juan, Puerto Rico.
En el 2009 sus caminos no se cruzaron, pero en 2013 chocaron en tres ocasiones resultando en tres victorias para los dominicanos. En la primera ronda se impusieron por 4-2 y luego en la segunda ronda los blanquearon por 2-0 antes de toparse de nuevo en el partido de campeonato que terminó 3-0.
Luego de la pésima actuación criolla, salen a relucir las siguientes observaciones que pudiesen ser factores que pasaron factura dominicana.
Para muchos, elegir a un jugador activo como gerente, como fue el caso de Nelson Cruz, restó puntos al «temible» equipo.
El segundo fue seleccionar a un dirigente, Rodney Linares, sin la experiencia ni el récord necesarios para dirigir a un conjunto de estelares.
Desde el anuncio como dirigente, fue una de las decisiones más cuestionada hacia el equipo criollo.