Los amores tóxicos están basados en el control, la pasión, la poca libertad individual, los celos, la dependencia emocional y la poca capacidad para entender los sentimientos y necesidades de uno delos miembros dela pareja lógicamente por el otro, a diferencia de la relación de pareja sana en la que prima el respeto, la consideración y la comprensión.
El amor tóxico tiene algunas características que con frecuencia las personas involucradas no detectan o las confunden con atenciones o cuidados.
En este tipo de relación tóxica uno de los dos busca permanente seguridad, aprobación y atención. Esto lo quiere conseguir a base de control, demandas ilimitadas de atención exigencias a su pareja de permanencia a su lado abandonando a sus familiares y amistades para centrarse solo en la pareja.
Los controles llegan a aislarles como personas y hacerles creer que les son tan necesarios que no existen sin ellos y que son imprescindibles para su existencia. Sin embargo, probablemente no les importa la felicidad del otro solo la posesión y manipulación, actuando bajo sus propios intereses y necesidades.
Si una persona viviendo en relación de pareja se siente controlada, que el otro lo intenta cambiar, lo culpabiliza frecuentemente, no entiende sus necesidades emocionales o físicas, no es empática, la descalifica seguido, no la valora, procandole miedo y sufrimiento, tiene que revisar esa relación y entender que estás con un amante tóxico que tiene miedo al abandono, a la soledad y a perder el control sobre la pareja. Buscar ayuda es la mejor decisión.
