De todos los deseos humanos el más fuerte es el Deseo Sexual. Sentimos deseo sexual hacia alguien e inmediatamente nos ponemos en movimiento para lograr el acercamiento.

Pienso si alguien se pregunta porqué nos conectamos con alguien de tal manera que disfrutamos el estar cerca, besarse, acariciarse y llegar a lo más íntimo físicamente, el coito.

En esta actividad sexual debe existir un dador y un receptor que deben interactuar para que sea de mayor gratificación el encuentro.

Tener una buena y adecuada comunicación sobre lo sexual, contribuye enormemente ayudando a las parejas a entender más las necesidades y deseos del otro.

Reflexiono de nuevo y me pregunto por qué la mayoría de nosotros no intentamos tener esa comunicación y en muchos casos nos negamos a tenerla o no es prioridad nuestra o simplemente estamos tan enfrascados en otros asuntos que consideramos de mayor importancia y no nos disponemos a comunicar nuestros gustos, deseos o frustraciones en el área sexual.

Todos, hombres y mujeres, tenemos la capacidad de percibir el nivel de satisfacción de nuestra pareja. Vuelvo a preguntarme por qué no nos mantenemos despiertos en términos sexuales y ahondamos un poco en cómo se siente la persona que comparte su cuerpo con nosotros.

Según la física cuántica, la parte está en el todo y el todo está en la parte. Apliquemos esto a la vida sexual entendiendo que el todo es la pareja y las partes somos cada uno de los que componemos la pareja.