A partir de ahora, los productos que tengan menos contenido, pero mantengan los mismos precios estarán marcados en los supermercados Carrefour, en Francia.
A menor cantidad, menor precio. ¿Cierto? No necesariamente.
La cadena francesa de supermercados Carrefour está colocando avisos en sus estantes para advertir a sus compradores sobre el fenómeno de la “shrinkflation” (algo así como «reduflación», una mezcla de reducción con inflación), en el que las empresas reducen los tamaños de sus productos pero mantienen sus precios iguales.
Dentro de los productos que se han visto señalados y avergonzados por Carrefour están la marca de té helado Lipton, los chocolates Lindt y los helados Viennetta.
La cadena de supermercados está advirtiendo a los consumidores cuando se ha reducido el tamaño de una botella o envase; o si estos contienen menos contenido del habitual.
Carrefour dijo que quería poner presión sobre las empresas fabricantes para que mantengan los precios bajos.
“Obviamente el objetivo de estigmatizar estos productos es poder decirle a las marcas que tienen que repensar sus políticas de precios”, dice Stefen Bompais, director de comunicaciones con los clientes de Carrefour.
Sin embargo, los grupos de protección al consumidor en Europa dicen que la práctica de la “reduflación” está generalizada a tal punto que incluso supermercados como Carrefour mismo incurren en ella a través de sus marcas propias.
Tema de precios
Carrefour ha identificado 26 productos que se han encogido sin que sus precios hayan visto cambios, de empresas como Nestlé, PepsiCo y Unilever.
Carrefour dice que la leche infantil Guigoz de Nestlé, por ejemplo, se había reducido de 900g a 830g.
Una botella de té helado Lipton sin azúcar con sabor a durazno -hecha por PepsiCo- pasó de 1,5 a 1,25 litros, según informó la cadena de supermercados francesa.
El director ejecutivo de Carrefour, Alexandre Bompard, ha dicho en repetidas ocasiones que las compañías de productos de consumo no estaban cooperando con los esfuerzos de recortar precios a pesar de una reducción en los precios de las materias primas.
Es la misma posición que tiene el ministro de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, se reunió en junio con 75 de los más grandes vendedores al detal y grupos de consumidores para pedir que redujeran los precios de sus productos.
Le Maire ha dicho que, a pesar de varias rondas de negociaciones, Nestlé y PepsiCo han sido de las compañías que no han querido reducir sus precios.
Estas dos empresas no han ofrecido declaraciones sobre el tema, pero la marca de chocolates Lindt aseguró que ha visto un aumento del 9,3% en los costos de sus materias primas.
“Reduflación”
El fenómeno de la reduflación no sólo existe en Europa, sino que se viene viviendo en Latinoamérica desde hace algunos años.
Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes de México (ANPEC), dijo en una entrevista con BBC Mundo en 2018 que en su país esta tendencia afectaba a los productos de alto consumo en general que son ofrecidos en presentaciones más pequeñas y en envolturas distintas a las originales.
Apuntaba que el fenómeno era evidente en panes, snacks, frituras, cereales, aceites, atún, aceitunas, suavizantes de tela, detergentes y refrescos, entre otros.
Vanesa Ruiz, gerente general del Centro de Almaceneros, Autoservicios y Comerciantes Minoristas de Córdoba (Argentina), también indicó entonces que venían detectando la «reduflación» desde hacía algún tiempo.
«Muchas empresas realizan esto de forma paulatina como una forma de ahorro, porque esas reducciones pequeñas en cada producto significan un beneficio importante para ellos», le dijo a BBC Mundo.
Cuauhtémoc Rivera, de la ANPEC, afirmó que en México la «reduflación» surgió impulsada por una fuerte caída del poder de compra de los consumidores.
«Las empresas están buscando abrir su portafolio para colocar sus productos al alcance de los distintos bolsillos con estas presentaciones de sus productos con cantidades menores», señaló.
*Con información de Lucy Hooker, reportera de negocios de BBC News.