Traficantes de personas arrojaron a unos 300 migrantes al mar frente a las costas de Yemen en apenas 24 horas, causando decenas de muertos o desaparecidos, en una nueva demostración del trato inhumano que reciben estos candidatos al exilio.
De acuerdo a la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), los traficantes de humanos tiraron ayer por la borda de sus embarcaciones a un total de 180 personas procedentes de Somalia y Etiopía.
Muchos jóvenes pagan a los traficantes con la esperanza de ser acogidos en Europa y tener una vida mejor.