
El ninguneo de los Estados Unidos al dejar casi tres años su embajada aquí sin un embajador y la calidad de los más recientes, activistas políticos sin experiencia diplomática premiados con el cargo, obliga a preguntarse si realmente hace falta uno. De los casi 200 países del mundo, República Dominicana es la única democracia estable sin embajador americano, junto con otros siete en situaciones críticas.
Eran de carrera
Hubo una época desde la década de los ’60 hasta los ’80 en que los embajadores estadounidenses en Santo Domingo eran funcionarios de carrera del servicio exterior, cuya prestancia ilustraba la importancia de la República Dominicana para el Departamento de Estado.
