Raphael, en un automóvil tras haber recibido este viernes el alta hospitalaria tras diez ingresado en el Hospital Doce de Octubre por un aparente accidente.
Madrid.- Raphael recibió este viernes el alta hospitalaria tras diez ingresado por un linfoma cerebral primario, del que ya está siendo tratado, según el parte médico del Hospital Doce de Octubre de Madrid.
El cantante abandonó el centro hospitalario en el asiento del copiloto de un vehículo, sonriendo a la prensa que le esperaba a las puertas y sin detenerse ni bajar la ventanilla para evitar el jaleo debido a la fuerte presencia de medios de comunicación.
“Se encuentra muy bien”, indicó su hijo Jacobo, que fue quien explicó que el cantante no se detendría ante la prensa.
Les invitamos a leer: Qué es el linfoma cerebral, el tumor que afecta al cantante Raphael
Linfoma cerebral primario
El cantante español Raphael se encuentra enfrentando un diagnóstico de linfoma cerebral primario, según el parte médico emitido por el Hospital Universitario 12 de Octubre.
Este tipo de tumor cerebral es una condición poco frecuente que representa menos del 5% de los tumores cerebrales primarios y se origina en el sistema nervioso central.
En el caso de Raphael, los especialistas detectaron dos nódulos en el hemisferio izquierdo de su cerebro, responsables de los síntomas neurológicos que presentó recientemente.
El linfoma cerebral primario es un subtipo de linfoma no Hodgkin que afecta directamente el cerebro, la médula espinal o los tejidos circundantes.
A diferencia de otros linfomas, este no suele extenderse más allá del sistema nervioso central. Sus causas no están del todo claras, aunque se ha observado una mayor incidencia en personas inmunocomprometidas o con condiciones como el VIH.
Les invitamos a leer: Raphael pasará hospitalizado Nochebuena y Navidad, pero «no es ningún drama», dice su hijo
Entre los síntomas más comunes de este tipo de tumor se encuentran dolores de cabeza persistentes, cambios en la visión, dificultades cognitivas o de memoria, debilidad muscular, y, en algunos casos, convulsiones.
Estos síntomas dependen de la ubicación exacta del tumor en el cerebro, ya que diferentes áreas controlan funciones específicas del cuerpo y de la mente.
El tratamiento para el linfoma cerebral primario combina generalmente quimioterapia y, en ocasiones, radioterapia.
