SANTO DOMINGO.-El músico y cantautor Ramón Orlando se mostró preocupado por la crisis económica y las muertes que está dejando tras de sí la pandemia del coronoavirus, por lo que asegura no habrá música por mucho tiempo.
Precisó que en este momento lo que hay y habrá es mucho luto por donde quiera, debido a que a quien no se le ha muerto un hermano, su padre, madre o un tío, se le fue un amigo, por lo tanto, nadie estará en fiesta cuando esto pase.
“Estamos orando para que esto se acabe, pero después que esto pase viene el luto, porque esto ha matado y seguirá matando a mucha gente y por lo regular, a los cabecillas de la familia”, dijo Ramón Orlando.
No podrán tocar
Y es que el panorama no pinta bueno para nadie, pero mucho menos para los que hacen música, según el artista, porque cuando ocurren casos como estos lo que más sufre es el entretenimiento.
“El mercado fuerte de los dominicanos es Estados Unidos, Europa, Colombia y Panamá y por ahí está el coronavirus matando muchísima gente. Nos queda orar y que nadie salga de sus casas si no es para una diligencia impostergable y quizás así podamos salir más rápido de esto”, dijo el artista.
Ramón Orlando recordó que por esta pandemia han fallecido varios artistas dominicanos, específicamente residentes en Nueva York.
Predicando por Zoom
A pesar del distanciamiento social, la iglesia La Casa de Cristo, de la cual es pastor, no ha dejado de funcionar y las prédicas las hace todos los días a las 3:00 de la tarde a través de la plataforma Zoom.
Cada tarde se conectan con el artista entre 30 y 35 hermanos de la iglesia con los cuales ora cada día por el país y el mundo y si alguien quiere que le ore a algún familiar solo tiene que escribirle y con gusto lo hará.
“Ya tenemos un mes haciendo este tipo de transmisión y de esa forma mantenemos la iglesia activa. También hago prédicas para otras iglesias que tienen esa plataforma, que me invitan para que les predique”, aseguró.
— Por Faclebook
Los domingos a las 7:30 tiene una transmisión através de su Facebook. Otro hermano de la iglesia hace este mismo culto los sábados a las 7:30 y su esposa, Judith Valoy, los lunes, a la misma hora, pero con las mujeres.