El presidente ecuatoriano Rafael Correa se refirió el sábado a los sentenciados a prisión que están refugiados en territorio de la comunidad indígena Sarayacu, en el centro sur de la Amazonía ecuatoriana.
«Es gravísimo lo que está pasando. Aquí no hay nada que negociar», dijo el mandatario, reiterando que no hay espacio para el diálogo sino para cumplir la ley.
Cléver Jiménez, Fernando Villavicencio y Carlos Figueroa fueron condenados a 18 meses de cárcel por injurias contra el presidente Correa el 21 de marzo.
En 2011, los tres opositores habían presentado ante la Fiscalía ecuatoriana una denuncia contra Correa por varios delitos relacionados con la incursión de militares al Hospital de la Policía para rescatarlo, durante la revuelta policial del 30 de septiembre de 2010.
El 24 de abril el Congreso del Pueblo Sarayaku anunció su decisión de acoger a los tres hombres dentro de su territorio.