Santo Domingo.- Censar nacionales haitianos ha significado un esfuerzo doble para los empadronadores, debido a que la mayoría desconoce del proceso, consideran que no tiene nada que ver con ellos y que se trata de un operativo de migración.
«Ha sido complicado porque se muestran desconfiados y uno tiene que explicarle que no es nada que tenga que ver con migración» dijo un empadronador que se reservó su identidad.
Indicó que su primer caso censando, fue precisamente con un nacional haitiano pero que luego, la persona entró en confianza y suministró las respuestas.
Aseguró que en otros de los casos, la persona se negó inicialmente a recibirlos porque se declaró extranjero y consideraba que no tenía nada que ver con el censo.
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Una supervisora del Censo a quien también le ha tocado empadronar nacionales haitianos, afirmó que en un caso en particular, el consultado se puso nervioso porque entendió que eran parte de un equipo de trabajo dr migración.
«Tuve que explicarle en qué consistía el proceso y asegurarle que no iba a ser deportado», declara.
El Día aprovechó para consultar a algunos nacionales haitianos pero casi todos, demostraron desconocimiento del censo, respondían asegurando ser dominicanos o se negaban a ser entrevistados.
El empadronamiento de extranjeros fue un tema conflictivo al inicio del X Censo Nacional de Población y Vivienda hasta el punto, de que grupos nacionalistas llamaron a no apoyar el conteo.
No obstante, el Gobierno despistó las críticas endureciendo las medidas migratorias y oponiéndose a un llamado de la Organización de las Naciones Unidas a no deportar extranjeros.
