Putin y Trump se verán en noviembre entre tensiones por tratado de desarme

Putin y Trump se verán en noviembre entre tensiones por tratado de desarme

Putin y Trump se verán en noviembre entre tensiones por tratado de desarme

Moscú.– Rusia y EEUU acordaron hoy que el jefe del Kremlin, Vladímir Putin, y el líder norteamericano, Donald Trump, se reunirán el 11 de noviembre en París, pero no lograron limar asperezas sobre la vigencia del primer tratado de desarme nuclear de la Guerra Fría.

“Por supuesto, sería útil continuar el diálogo directo con el presidente de Estados Unidos”, dijo Putin al recibir en el Kremlin al asesor de seguridad nacional de ese país, John Bolton, quien respondió- “El presidente Trump estará encantado de reunirse con usted».

La reunión, confirmada por el Kremlin, tendrá lugar en el marco de los actos conmemorativos por el centenario del fin de la Primera Guerra Mundial, que tendrán lugar en la capital francesa con presencia de los principales líderes mundiales.

“Será una reunión bilateral normal”, precisó Yuri Ushakov, asesor presidencial, en referencia al que será el primer cara a cara entre ambos líderes desde la cumbre de Helsinki de julio pasado.

Desde entonces, las tensiones entre el Kremlin y la Casa Blanca no han hecho sino aumentar. Y el última de las manzanas de la discordia ha sido el tratado de eliminación de misiles nucleares de medio y corto alcance (INF), que Trump ha dicho que Washington se propone abandonar.

“Para nosotros, lo digo francamente, es sorprendente ver cómo Estados Unidos da sin motivos pasos que nosotros no podemos considerar amistosos”, señaló el líder ruso al abrir la reunión.

Putin despertó las risas de los presentes al preguntar a Bolton si el águila que figura en el escudo de EEUU “se tragó todas las aceitunas” de la rama de olivo que sostiene con una de sus garras y ahora sólo le quedan las flechas.

“Recientemente, hemos oído de la intención de Estados Unidos de abandonar el tratado de eliminación de misiles de mediano y corto alcance y conocemos las dudas del Gobierno norteamericano sobre la necesidad de prorrogar el START-3, así como del propósito de emplazar determinados elementos de defensa animisiles en el espacio”, añadió.

De esa forma, Putin esgrimió todas las afrentas en el ámbito estratégico que han precedido la visita de Bolton, que se reunió también en Moscú con los ministro de Exteriores y de Defensa, Serguéi Lavrov y Serguéi Shoigu.

Seguidamente, Bolton subrayó que las declaraciones de Trump sobre el reforzamiento del arsenal nuclear de EEUU en caso de que Rusia y China no entren en razón no son, ni mucho menos, un farol.

“En lo que se refiere a presentar el aviso formal de la retirada (del INF), aún no ha sido presentado, pero lo será en su debido momento”, señaló.

Bolton, que recordó que en 2001 él fue también el encargado de informar a Moscú sobre los planes de abandonar el tratado de defensa antimisiles, subrayó que el INF está “obsoleto”, está siendo violado permanentemente y es ignorado por otros países.

Recordó que el problema no es que Washington se plantee denunciar el tratado suscrito por el 8 de diciembre de 1987 por los entonces presidentes soviético, Mijaíl Gorbachov, y estadounidense, Ronald Reagan, sino que Rusia lleva años violándolo.

“No es algo nuevo. La amenaza no es la retirada norteamericana del tratado. La amenaza son los misiles rusos ya desplegados” en Europa, insistió en una acusación que Moscú rechaza categóricamente.

El asesor de Trump leyó un informe emitido en su momento por la Administración del anterior presidente, Barack Obama, en el que asegura que Rusia infringe las cláusulas de dicho tratado, al menos, desde 2008.

A su vez, acusó a países como China y Corea del Norte de aprovechar la situación para desarrollar sus arsenales nucleares, algo que también han hecho Israel, Irán, Pakistán e India.

Según las estimaciones de EEUU, “entre un tercio y la mitad” del arsenal nuclear del gigante asiático no se ajustaría al INF, lo que Bolton consideró uno de los factores que obligan a la Casa Blanca a plantearse renunciar al acuerdo.

“Sólo hay un país que está constreñido por el INF- Estados Unidos”, afirmó. En cuanto a la posibilidad de “universalizar el tratado” para que entren nuevos países, admitió que es algo que Washington se planteó en 2004, pero todo los intentos en ese sentido “fracasaron».

“Así que hay una nueva realidad estratégica. Este es un tratado bilateral de la Guerra Fría relativo a misiles balísticos en un mundo multipolar con misiles balísticos (…) y eso es algo que preocupa a los rusos de manera muy sustancial y hemos hablado de ello”, dijo Bolton.