En la actualidad la tendencia es llevar una vida saludable, la mayoría de padres colocan a sus hijos en actividades y equipos deportivos; pero lo preocupante es el poco conocimiento que existe acerca de los traumatismos dentales y la falta de protección que se utiliza para los dientes durante el desempeño de actividades deportivas.
Los traumatismos dentales son las razones más frecuentes por las que se presentan las emergencias en el consultorio dental. Estos son más comunes en niños (a) pero también pueden ocurrir en adultos y casi siempre los dientes más afectados son los antero-superiores (delanteros). En algunos casos los dientes de fracturan, en otros se quedan intactos solo lacerándose los tejidos blandos alrededor del diente y en el peor de los casos la pieza puede llegar a avulsionar, es decir, salir en su totalidad de la boca.
Ahora bien, para evitar en un gran porcentaje las emergencias durante el ejercicio físico, existen los llamados “protectores bucales”, piezas esenciales para el equipamiento atlético, ayudan a amortiguar o reducir cualquier golpe recibido en la cara, contribuyendo a que no se fracturen los dientes, la lengua y huesos maxilares.
Podemos encontrar varios tipos de protectores bucales:
-Hechos a la medida: se hacen exclusivamente para el individuo en cuestión tomando una copia de su arcada dental y luego se envía a un laboratorio para que confeccione la placa.
-Semiadaptables: los venden prefabricados en tiendas donde se consiguen artículos deportivos o también en farmacias, el paciente lo coloca en agua hirviendo para que se ablande y luego lo lleva a la boca para que se copie el tamaño de su arcada dental.
-Estándar: también vienen prefabricados en diversos tamaños, se escoge el tamaño que más le ajuste al paciente, es muy probable que este tipo de protector no ajuste de manera correcta.
Sin duda alguna el protector más seguro y cómodo es el fabricado a la medida del paciente.
Al usar protectores bucales usted estará cuidando su dentadura, la cual necesitará por el resto de su vida.
Dios le bendiga abundantemente.
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