Nobleza obliga. Tengo que reconocer públicamente, con sincera satisfacción, que el director de la Amet, general de brigada Frener Bello Arias, cumplió cabalmente la promesa que hizo al país a través de esta columna, de realizar una investigación y establecer responsabilidades en el sonado caso de la proliferación de multas y contravenciones repetidas por supuestas violaciones a las leyes del tránsito terrestre.
Cuando el general Bello Arias me escribió prometiendo una exhaustiva investigación para determinar la verdad en torno a la denuncia pública sobre irregularidades en los récords oficiales de las contravenciones, confieso que dudé.
Penosamente, me estoy acostumbrando a dudar cuando un estamento oficial promete cualquier cosa.
Pero en este caso, lo prometido se cumplió y el general Bello Arias no solamente rindió su informe, sino que también hizo las recomendaciones para establecer las sanciones a aplicar a los responsables de la irregularidad de marras.
Felicitaciones, general.
Que su ejemplo sea imitado por todos aquellos que ejercen funciones públicas. Soñar no cuesta nada. ¿Verdad?