Santo Domingo.– Los propietarios de los negocios donde se comercializa la hookah entienden que la prohibición en lugares públicos y cerrados, así como en vehículos públicos provocará que las autoridades realicen desórdenes en los lugares que incumplan con la Ley.
Charles Melenciano, propietario de Sweet Ju-k, manifestó que las autoridades deben entender de manera correcta lo que establece la legislación y teme que los encargados de cumplirla se acerquen a su negocio y destruyan su mercancía.
“Es necesario que las autoridades entiendan de manera correcta lo que establece la ley, ya que en este negocio no se fuma, sino que se comercializa”, dijo.
De su lado, Roberto González indicó que en el momento en que las autoridades se dirijan al colmado donde funge como dependiente, estos deben hacerlo con una notificación para evitar el desorden.
Lo que dice la ley
La ley prohíbe, además, el uso de Hookah en lugares cerrados bajo techo, de uso colectivo, en vehículos destinados al transporte de pasajeros.
La misma, sancionará, además, con la pena de cinco a diez salarios mínimos del sector público, a los propietarios de los lugares públicos o privados que permitan o toleren el uso de ese dispositivo en sus establecimientos.
La ley establece, también, en su artículo 5, que sancionará con la pena de cinco a quince salarios mínimos del sector público, a todas personas que utilice la Hookah en establecimientos abiertos o cerrados.