Venecia Joaquín
La educación es el proceso de promover el desarrollo intelectual, cultural, las destrezas y forma de comportamiento ordenado del individuo, con fines sociales.
Las principales fuentes de aprendizaje son: el hogar, escuela, gobierno, medios de comunicación, la sociedad en general. La persona aprende no solo a través de la palabra, sino observando el comportamiento de los demás.
La educación escolar la efectúan maestros preparados para esos fines. Su objetivo es transferir conocimientos, métodos, valores, que contribuyan a desarrollar las potencialidades, proporcionar la integración social ¡despertar la creatividad del individuo! Por supuesto, educar no es adoctrinar.
Tenemos varias universidades e instituciones que por décadas han formado maestros estupendos. Sin embargo, el Ministro de Educación anunció recientemente, que contratará profesores extranjeros, en distintas disciplinas, para formar a profesores del sistema educativo nacional. “Ayudaran a formar a quienes tendrán la encomienda de educar al ciudadano del mañana”, puntualizó.
¿Qué motiva a buscar pedagogos extranjeros para formar nuestros maestros? ¿Qué esta fallando en los que tienen esa misión? El Ministro debería informar de los vacíos existentes. Tenemos excelentes profesionales formados con educadores criollos.
Cabe recordar que en el proceso de educar, además de los maestros, intervienen padres de familias, lideres políticos, religiosos, funcionarios, prensa, etc. Sus comportamientos y acciones, son fuentes de aprendizajes.
Si la educación anda mal, deben revisar todos los escenarios. ¿Están los profesores extranjeros aptos para hacerlo?
No creo que solo sea cuestión de métodos pedagógicos y formación de maestros. Necesitamos una reingeniería de todo el sistema educativo.
Asegurarnos que estamos invirtiendo bien los recursos, que tenemos la estructura adecuada, no solo en lo material, con aulas, sino también en el contenido curricular, equipos y el personal.
Es importante que los directores, técnicos, maestros, no sean seleccionados con criterios políticos partidistas y sepan hacia donde van; que estén debidamente incentivados y ubicados en posiciones donde aporten acorde con su capacidad, que dispongan de las herramientas necesarias.
Debemos ser cuidadosos con el afán de vender la idea de que lo extranjero es sinónimo de calidad. También al innovar con proyectos como la tanda extendida.
La escuela no puede ser centro de caridad ni lugar para cuidar niños a fin de que los padres trabajen o hagan cualquier cosa. Eso la distrae de su misión… Cautela con la tecnología, no descuidemos las bibliotecas.
El Ministro de Educación debería reunir a todos los que de una u otra forma son responsables de la educación, de formar hombres y mujeres de bien, útiles a la sociedad, a fin de ponderar con objetividad todo el sistema educativo.
¿Cuál es el afán de tener profesores extranjeros? Antes de contratarlos, hagamos la reingeniería.
