Bayahibe, La Romana.- Los probióticos desplazarán a diversos antibióticos en el combate a varias enfermedades, especialmente por las ventajas que estos tienen en el organismo y pronta capacidad de respuesta.
Así lo analizaron varios médicos pediatras, nutriólogos, gastroenterólogos e investigadores en un evento que analiza la microbiota, los probióticos y los prebióticos.
El presidente del Grupo de Investigación del Caribe y Centro América para la Microbiota, Probióticos y Prebióticos, doctor Dimas Rosa, aseguró que aún están en estudio los beneficios microbianos en el organismo, pero desde ya se augura que podrían desplazar a los antibióticos.
Probióticos son alimentos o suplementos que contienen microorganismos vivos destinados a mantener o mejorar las bacterias «buenas» del organismo. Prebióticos son alimentos (generalmente con alto contenido de fibra) que actúan como nutrientes para la microbiota humana, esta última -conocida como flora intestinal, microflora o flora humana- es el conjunto de microorganismos vivos o bacterias que se encuentran en el intestino o tubo digestivo del organismo humano.
La investigadora venezolana que se desarrolla en Estados Unidos, María Gloria Domínguez, expuso que el microbioma humano es un mundo de información que conecta con géneros, geografía humana, hábitos alimenticios y otros.
Observó que, por esta razón, las investigaciones apuntan a que los antibióticos serán los grandes perdedores con el estudio e impacto de los probióticos y los prebióticos.
El doctor Martin Blaser aseguró que la carrera en el estudio de estos temas ya adelanta que podrían desplazar a los antibióticos en el combate de diversas enfermedades humanas.
En tanto que el doctor Alberto Santana, uno de los primeros médicos dominicanos en hablar del tema, hace unos 15 años, explicó que algunas enfermedades, como el autismo y la enfermedad hepática, así como las cerebrales, se están tratando con probióticos y están teniendo muy buenos resultados.
Indicó que los probióticos son bacterias que viven en el cuerpo y que hay que aprender a educarlas y aumentarlas para, a través de ellas atacar a las bacterias malas”.
Agregó que hoy en día se están acabando las armas de antibióticos en contra de los virus, porque se ha demostrado que las bacterias se están haciendo más fuertes.
Dijo que los antibióticos tienen muchos efectos colaterales, “tienen que metabolizarse en el cuerpo ´en el hígado´ de ahí van al torrente sanguíneo y luego al cerebro”.
Además, destacó que previo a la prescripción de un antibiótico se deben comparar los daños o interacciones frente a otros medicamentos.
Mientras que los probióticos como son bacterias amistosas no tienen efectos colaterales, aunque afirmó que deben ser usados con mucha cautela, especialmente en pacientes que están inmunodeprimidos. En estos citó los pacientes de cuidados intensivos.
“Se nos está acabando el arsenal de armas y se están inventando nuevas armas con virus buenos y otros antibióticos, pero yo creo que el futuro va a estar en los probióticos”.
Las consideraciones se produjeron en el Primer Encuentro del referido Grupo, que se desarrolla en un hotel de esa zona turística, con una agenda de 16 conferencias a cargo de especialistas nacionales y extranjeros.