Claudio Caamaño Vélez
No siempre es aplicable la propiedad conmutativa: “el orden de los factores no altera el producto”. No es lo mismo un preso político que un político preso, de hecho, son muy diferentes. Les explico…
Un preso político es aquella persona enviada a la cárcel sin haber cometido delito, porque sus ideas suponen una amenaza para el sistema político imperante.
Es el caso de miles de personas en Los 12 Años de Balaguer, perseguidos y encarcelados (y asesinados) por oponerse a ese régimen criminal. Por exigir democracia y respeto a los derechos eran enviados a La Victoria y otras cárceles, y sus expedientes eran reenviados eternamente, pasando años en la cárcel sin una sentencia.
Ejemplos de presos políticos son Eligio Antonio Blanco Peña “El Pai”, Cocuyo Báez y Fafa Taveras. Por solo mencionar tres.
Por otro lado, los políticos presos son personas que usaron el poder político para cometer actos ilícitos, por los cuales son enviados a prisión. Generalmente han incurrido en corrupción administrativa, coalición de funcionarios, asociación de malhechores, y otros delitos vinculados a la administración pública.
Ejemplos de esto son Alexis Medina, Adán Cáceres y Jean Alain Rodríguez. Por solo mencionar tres (y los que faltan).
Hago esta aclaración porque la dirección del Partido de la Liberación Dominicana se ha dado la tarea de alegar persecución política ante el apresamiento de políticos corruptos. Eso es un insulto y una falta de respeto a la memoria de los presos políticos, apresados y torturados por luchar a favor del pueblo.
Para que se entienda mejor, les resumo la diferencia: los presos políticos son héroes y los políticos presos son basura.
