Presidente surcoreano sube bordo del submarino estadounidense

El presidente surcoreano sube a bordo del submarino estadounidense con capacidad nuclear

El presidente surcoreano sube a bordo del submarino estadounidense con capacidad nuclear

Yoon aprovechó para repetir algo en lo que tanto Washington como Seúl han insistido en los últimos meses, diciendo que si Pionyang cruza determinadas líneas.

Seúl.- El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, subió hoy a bordo del USS Kentucky, submarino estadounidense con capacidad para lanzar misiles balísticos nucleares que arribó ayer al puerto de Busan en un intento de enviar a Corea del Norte un mensaje disuasorio.

“La llegada del USS Kentucky muestra claramente el compromiso de la República de Corea (nombre oficial de Corea del Sur) y Estados Unidos de desplegar regularmente activos estratégicos estadounidenses y defender la credibilidad de la disuasión extendida”, dijo Yoon al subir a bordo de este sumergible de tipo SSBN.

“Los dos países responderán de manera abrumadora y convincente al avance de las amenazas nucleares y de misiles de Corea del Norte a través del Grupo de Consulta Nuclear (NCG) y los despliegues regulares de activos estratégicos como el SSBN”, añadió.

Yoon aprovechó para repetir algo en lo que tanto Washington como Seúl han insistido en los últimos meses, diciendo que si Pionyang cruza determinadas líneas, la respuesta combinada de los aliados “conducirá al fin del régimen».

Las palabras de Yoon llegan un día después de que el submarino llegara a Busan (350 kilómetros al sureste de Seúl) y de que el NGC celebrara su reunión inaugural.

En la declaración que en abril firmaron el propio Yoon y el presidente de EE.UU., Joe Biden, Washington se comprometió a reforzar la llamada “disuasión extendida”, a través de la cual protege a su aliado y busca desalentar a Pionyang de seguir adelante con el desarrollo de armas de destrucción masiva.

Entre los elementos llamados a reforzar la “disuasión extendida» se incluyó el envío del SSBN y la creación del NCG, mecanismo para coordinar respuestas estadounidenses a posibles ataques de Corea del Norte, incluyendo la opción nuclear.

Pionyang, que ya advirtió la semana pasada que la llegada del submarino aumentaría las tensiones regionales, lanzó hoy dos misiles balísticos de corto alcance al de Marzo de Japón (llamado de Marzo del Este en las dos Coreas) en aparente respuesta a lo acaecido ayer.

La semana pasada el régimen norcoreano también probó por segunda vez un Hwasong-18, su misil balístico intercontinental (ICBM) más sofisticado.

Tras el fracaso de las negociaciones sobre desnuclearización de 2019, la tensión ha vuelto a dispararse en la península coreana, con Pionyang rechazando cualquier oferta de diálogo y realizando un número récord de pruebas de misiles, y Seúl y Washington retomando sus grandes maniobras conjuntas y desplegando periódicamente activos estratégicos estadounidenses en la región.