SANTO DOMINGO.- El presidente de la Junta Central Electoral, Román Jáquez, reiteró que en esa institución están enfocados en una reforma electoral que guarde correspondencia con los objetivos de desarrollo del milenio y que permita al Estado cumplir con la deuda que tiene con la mujer política y con la paridad, y señaló que el momento es el ideal para celebrar con dignidad los 80 años de que la mujer dominicana tuviera derecho al voto.
Al dejar iniciado el primer Congreso Internacional Democracia, Elecciones e Identidad, para tratas sobre las Reformas Electorales y del Registro Civil, al que asistió el presidente Luis Abinader, Jáquez Liranzo precisó que en su propuestas de reformas pretenden como órgano, mejorar y crear mayores niveles de equilibrio, justeza, control y sanciones ante la obtención de recursos ilícitos en el financiamiento público y privado que reciben los Partidos, agrupaciones y movimientos políticos.
Además, buscan impactar mediante un nuevo diseño de los plazos para las precampañas y campañas electorales, los topes de gastos para esos períodos y que se pueda contar con un adecuado esquema de juzgamiento de las infracciones electorales, como la violencia política hacia la mujer.
“Estamos confiados en que, en esta legislatura, el Congreso Nacional pueda aprobar la reforma electoral que nos permita actualizar y fortalecer nuestro sistema electoral, todo ello como fruto de un gran diálogo y un consenso entre los distintos sectores que integran la sociedad dominicana, tal y como se ha venido haciendo”, manifestó el presidente de la JCE.
El congreso tuvo como primer panelista a Francisco Guerrero, quien es secretario para el Fortalecimiento de la Democracia, de la Organización de Estados Americanos (OEA), quien trató el tema 2estado de la democracia en la Región.
Guerrero hizo un llamado a para que se cuiden al árbitro electoral, haciendo referencia de la Junta Central, y señaló que el mismo no se puede destruir en función de ganancias personales, ganancias del momento o ganancias políticas.
“Nos ha tomado décadas construir la institucionalidad electoral y es nuestra obligación moral y política cuidar al árbitro”, enfatizó.