El G7, con Estados Unidos a la cabeza, consideró ayer que el futuro de Siria debe escribirse sin Bashar al Asad.
En el segundo día de la cumbre, los ministros de Relaciones Exteriores del grupo (Estados Unidos, Alemania, Japón, Reino Unido, Canadá, Francia e Italia) mantuvieron una reunión sobre Siria con diplomáticos de Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita, Jordania y Catar.
En tanto, el secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson, llegó ayer a Rusia con un ultimátum para el presidente ruso, Vladímir Putin, al que instó a elegir entre el régimen sirio de Bachar al Asad y una alianza con Occidente.