
Santo Domingo.- Hoy por primera vez en sus 50 años de dedicación no es celebrada abierta de la forma tradicional la Solemnidad de Virgen de La Altagracia en la Basílica de Higüey.
Como consecuencia de la llegada del Covid-19 al país, este 21 de enero la Basílica de Higüey, uno de los santuarios más concurridos, no abrió sus puertas de forma presencial a los miles de fieles y peregrinos que cada año se desplazan al santuario a rendirle tributo de amor y devoción a la madre protectora del pueblo dominicano.
Una vigilia realizada desde la virtualidad ha sido la forma en que miles de personas han podido profesar su fe mediante el rezo del rozario, novenas y desde sus casas han clamado a la Virgen de La Altagracia para que intervenga y con su manto cubra al pueblo que la consagró como su protectora.
