"Ponte Alerta San Cristóbal", proyecto juvenil para la prevención de desastres

«Ponte Alerta San Cristóbal», proyecto juvenil para la prevención de desastres

«Ponte Alerta San Cristóbal», proyecto juvenil para la prevención de desastres

San Cristóbal.- Cansados de esperar por las autoridades competentes, jóvenes de distintas comunidades de esta provincia decidieron tomar la iniciativa de desarrollar una cultura en prevención de riesgo y desastre con el apoyo de varias organizaciones internacionales.

«Ponte Alerta San Cristóbal» cuenta con el auspicio del consorcio de organizaciones Oxfam- Plan International- Hábitat para la Humanidad y el apoyo de la Unión Europea.

El objetivo del proyecto, que inició en septiembre de 2015, es involucrar a los jóvenes en su entorno y puedan dar una mejor respuesta ante un evento natural.

Esta iniciativa busca que puedan asumir un papel de liderazgo a fin de inspirar una transformación positiva de las mentalidades, actitudes y comportamientos dignos tanto en ellos como en sus respectivas comunidades.

Los sectores que están en el proyecto son los barrios Puerto Rico, Los Americanos, Los molinas, Las Flores, Jeringa además de Concentración, La piña en Madre Vieja Norte y el municipio de Cambita.

Sobre el proyecto

«Alerta San Cristóbal» es un proyecto para fortalecer la resilencia urbana a través de la protección humanitaria, la gestión de centros colectivos y la comunicación en San Cristóbal”, según explican sus prometores.

En principio estará concentrado en los municipios de San Cristóbal y Cambita para fortalecer allí la protección humanitaria de los colectivos más vulnerables que habitan en áreas urbanas y periurbanas, con especial énfasis en una mejor gestión de los centros colectivos (albergues) y de la comunicación del riesgo a nivel nacional, provincial y local.

Voluntarios en uno de los talleres de entrenamiento.

Voluntarios en uno de los talleres de entrenamiento.

Para ello se desarrollan acciones preventivas sencillas, de preparación a desastres, de bajo costo, que serán implementadas con los ayuntamientos y las propias comunidades, las cuales contribuirán a evitar la pérdida de vidas, bienes materiales y medios de subsistencia de los municipios involucrados.

El total beneficiará a 54,549 personas y 78 organizaciones, entre las que se incluyen la Comisión Nacional de Emergencia, la Defensa Civil, la Oficina Nacional de Meteorología, el Ministerio de Educación, el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillado, la Federación Dominicana de Municipios, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y el Consejo Nacional de la Niñez, entre otras.

San Cristóbal, entre las provincias más vulnerables

Por su ubicación geográfica, la provincia de San Cristóbal está caracterizada por una alta exposición a fenómenos naturales como ciclones, tormentas tropicales, sismos, tsunamis, deslizamientos, sequías combinadas con factores de vulnerabilidad física, socioeconómica y ambiental.

Desde 1980, 47 eventos han impactado en territorio nacional. Según la Comisión Nacional de Emergencia, durante la tormenta tropical Isaac sólo en la zona sur se estimaron pérdidas agrícolas por más de 45 millones de US$ (principalmente entre las personas más pobres).

¿Cómo trabajan los jóvenes?

La sociedad dominicana considera que los jóvenes constituye una poderosa fuente de cambio, cuya energía y competencias deben aprovecharse a su máximo esplendor para lograr así una cultura de prevención de riesgo efectiva.

Antes de dirigirse a sus comunidades, los jóvenes que participan en el proyecto trabajan en su crecimiento interno: se comprometen a empezar por ellos mismos o » marcar la diferencia entre lo que es y será San Cristóbal». Esto supone embarcarse a un proceso de aprendizaje a fin de multiplicar lo aprendido, lo que inculca su compromiso y responsabilidades.

Testimonios

Joan Díaz Santana, Los Americanos

«Siempre que se habla de mi provincia en los medios de comunicación es de cosas malas, crímenes, violencia, drogas. Nosotros podemos cambiar esta opinión que tiene la gente, podemos unirnos y de seguro que esta percepción cambia».

Mili Muñoz, Los Molina

«Creo que la iniciativa de estas organizaciones es buena y es un motor para que los jóvenes nos involucremos en aprender para multiplicar, porque si estamos correctamente informado podremos hacer que otros lleguen al proyecto».

Esmirna Vasthy Esteban, Barrio Nuevo

Domingo Olaverría y Esmirna Esteban (de pie),

Domingo Olaverría y Esmirna Esteban (de pie), Joan Díaz y Milly Muñoz (sentados).

«San Cristóbal, dependerá de lo que hagamos hoy. Recuerdo la crecida del río Nigua, esa situación daba pena, nosotros no estábamos capacitados en este tema y quedamos devastados pero por suerte no hubo muertes.

Es por ello que todos los jóvenes debemos unirnos para hacer de esta provincia algo mucho mejor».

Domingo Antonio Olaverría, Los Molinas

«Los jóvenes tienen que aprender a través de la experiencia. Por ejemplo, cuando tú conoces a alguien que ha pasado por problemas de estar refugiados a causa de inundaciones, ciclones uno entiende el lado humano de estas personas y se pone en su lugar».

Felipe Peña, dirigente comunitario Madre Vieja Norte

«Estoy muy agradecido por haber tenido la oportunidad de participar en el proceso de aprendizaje de este proyecto. Esta experiencia me ha hecho conocer más los problemas reales que tiene la provincia y si estamos preparados lo podemos enfrentar mejor «.

Ivelisse Brito Miliano, representante de padres de La Piña

«Es bien importante que los jóvenes se involucren para que así puedan transmitir sus conocimientos a sus familiares y en la sociedad que los rodea».

Todos ellos confían que al finalizar el proyecto, a finales de septiembre de este año, los residentes en las zonas vulnerables de la provincia estén en mejores condiciones de enfrentar cualquier fenómeno natural, sobre todo, que sea capaz de evitar o reducir al mínimo las pérdidas de vidas humanas.