Poner el miedo a tu favor

Poner el miedo a tu favor

Poner el miedo a tu favor

German Marte

“Lo que me preocupa no es que me hayas mentido, sino que de ahora en adelante ya no podré creer en ti”, Friedrich Nietzsche.

Desde antes del diluvio, el miedo ha sido utilizado como una poderosa arma para lograr determinados objetivos, pero sobre todo para someter a quienes se dejan dominar de él.

Las religiones lo usan para lograr la obediencia ciega de los feligreses a los mandatos de la iglesia que ellos venden como si fueran divinos.

Hay padres que lo utilizan para manipular a sus hijos y muchos maridos para dominar a sus mujeres.

La mafias usan el miedo de manera efectiva. No es sino por el temor a la cruel represalia como un minúsculo grupo de pandilleros logra imponer su dominio en la comunidad.
No obstante, reconozco que el miedo tiene su importancia siempre que nos aleja de posibles peligros. Ahí es útil.

Empero, los malintencionados que se valen del miedo no les importan el daño que puedan ocasionar a gente inocente, incluso a toda la sociedad con tal de alcanzar sus metas.

Uno suele relacionar el terrorismo con grupúsculos políticos o religiosos, de gente desquiciada, pero existe una forma superior, que se llama terrorismo de Estado.
El más brutal y emblemático lo usó Hitler en Alemania.

Aquí conocimos a Trujillo; y luego a Balaguer. Sin embargo, el miedo también lo usan gobiernos que se dicen democráticos.

¿Acaso no es terrorismo de Estado cuando un partido o unos funcionarios presionan a los empleados públicos para que apoyen a determinado candidato porque de lo contrario perderán sus puestos? También hay “demócratas” que presionan, y si pueden chantajean a empresarios para que favorezcan a su candidato.

Ahora, en medio de la pandemia del coronavirus, existe la sospecha de que el gobierno manipula los datos y «administra» convenientemente, según piensan, la cantidad de pruebas PCR que se realizan. Igual ocurre con los casos de contagio y muertos a causa de la Covid-19 que diariamente -como si fuera una lotería- ofrece Salud Pública.

Cuando llovían las críticas por la lentitud en la realización de las pruebas, las autoridades se vanagloriaban de que este era uno de los países donde menos casos de coronavirus se estaban registrando. Algo totalmente falso, ya que teníamos y tenemos más casos y muertes que los demás países de Centroamérica y el Caribe.

El gobierno, en esta coyuntura electoral, manipula no necesariamente los datos, pero si la cantidad de pruebas que se realizan y el momento en que se ofrecen los datos.
El ministro de Salud Pública dijo que las estadísticas tenían hasta tres meses de retraso. Luego reculó, aunque de todos modos admitió que hay un retraso.

Cada día el funcionario nos «sorprende» con un nuevo récord en el número de contagiados. Obvio: a más pruebas, más casos. Esa información la usa el gobierno para meter miedo a la gente para elevar la abstención, porque suponen que eso le conviene a su candidato mudo.

Pero como la oscuridad se desvanece ante la luz, el miedo desaparece cuando la gente lo enfrenta con los ojos abiertos.

Por eso confío que el próximo 5 de julio, la ciudadanía, con el dominio de la verdad, y sin miedo al coronavirus, saldrá con su mascarilla a votar.



German Marte

Periodista dominicano. Editor www.eldia.com.do. Comentarista de radio y TV.