tImponente Teatro Nacional Eduardo Brito, construido en los doce años del presidente Joaquín Balaguer e inaugurado en 1973.
Santo Domingo.-La renovada Plaza de la Cultura Juan Pablo Duarte, rinde tributo a su nombre y enaltece el patrimonio histórico, natural y artístico del país a través de las entidades que forman parte de ese entorno.
Allí llegan cada mes hasta 8 mil visitantes que no sólo se adentran y enriquecen el conocimiento sobre la cultural dominicana, sino que disfrutan de un ambiente de recreación sana.
Esta importante plazoleta está enclavada en el histórico sector de Gascue, específicamente en la avenida Máximo Gómez, a pocos metros de donde hizo vida el extinto presidente Joaquín Balaguer, quien fuera su creador en los años 70.
Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña, que da a la avenida César Nicolás Penson.
El lugar acoge en su entrada principal, el Teatro Nacional Eduardo Brito, lugar por excelencia para presentaciones artísticas, teatrales y de otras índoles, con capacidad para mil 800 personas y donde se realizan hasta diez actividades al mes.
Juramentación
Por primera vez en la historia este fungió de escenario para la juramentación del segundo mandato de gobierno del presidente Luis Abinader Corona, al que asistieron como invitados especiales mandatarios de quince países.
La plaza también es el sitio ícono donde suele realizarse, desde 1997 la Feria Internacional del Libro de Santo Domingo , que en su última entrega concentró unos 300 mil visitantes.
Allí tiene su Dirección junto a la Dirección General del Libro y la Lectura.
Biblioteca
Además de los relevantes Museo del Hombre Dominicano, el de Historia y Geografía, el Natural, y la Galería de Arte Moderno del país, cuenta también con la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña.
Fragmento del Muro de Berlín, donado por República Federal de Alemania. Eliezer Tapia.
Esta, aparte de superar los 175 mil libros y documentos bibliográficos, alberga a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), entidad que data de 1945 con sede en París, y que tiene la misión de contribuir a la paz y la seguridad en el mundo a través de la educación, la ciencia, la cultura y las comunicaciones.
La biblioteca se presta para estudios, conferencias, publicación de libros, talleres, entre otros. Para Yahaira Torres, directora y encargada de eventos, la Plaza es uno de los ejes principales del arte y cultura, no sólo por concentrar los museos y el Teatro Nacional.
Cinemateca
“Aquí, por igual, está la Cinemateca Dominicana (1976), una dependencia de la Dirección General de Cine, donde se respira arte”, refirió Torres.
Dijo que es el sitio por excelencia para los amantes del séptimo arte y en ella se concentran fílmicas del cine dominicano, documentales y se exhiben películas criollas al menos dos veces al mes, como además reciben visitas de figuras importantes relacionadas a ese mundo, aparte de ofrecer charlas y talleres a estudiantes.
La Cinemateca, ahora, se encuentra en un proceso maravilloso de remozar sus salas para un mayor disfrute del séptimo arte, los amantes de este, pueden encontrar aquí toda la historia del cine dominicano y uno de los auditórium más completos, con una ocupación para 524 personas, detalló Torres, comunicadora social.
“Desde que puse el primer pie aquí cuando la ministra Milagros Germán me dio el honor de ocupar este puesto, hace un año, observé que todo el que viene aquí o se dirige a un museo o se inclina por el arte”, comentó Torres,
Afirmó que desde entonces, han puesto empeño para que la plaza resplandezca, ya que estuvo un tiempo apagada fruto de la pandemia de la Covid-19.
Fuente de la Brújula, que rinde culto a ese instrumento de orientación terrestre.
Fuente de la Brújula
En este espacio de recreación se rememora la brújula, instrumento milenario con aguja imantada para señalar el norte magnético terrestre, el cual inventaron los chinos.
Ahí, se enarbola la bandera dominicana. En el mes de noviembre la plaza volverá a ser escenario de la Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2024, versión vigésima sexta.
Lo que fue el lugar
— Antecedente
Este entorno fue la hacienda de doña Julia Molina Chevalier, madre del tirano Rafael Leónidas Trujillo, donde luego de finalizar la dictadura, se comenzó a desarrollar el proyecto más grande cultural histórico del país.
