
Santo Domingo.-En una parte de la emergencia del hospital Salvador B. Gautier el calor golpea a los pacientes, familiares y los propios médicos que allí laboran, pues no funciona el aire acondicionado y tienen las ventanas abiertas como forma de paliar la sofocante temperatura.
En una de tantas camillas se observa una pareja de adultos mayores. Él está sentado junto a ella, como su soporte. Ella tiene puesto el suero, pero por el momento se desconoce si será el calor lo que provoca que esté cabizbaja o el mal que la aqueja.
Las camillas no dan abasto para la demanda de asistencia, así que usan una silla plástica para sentar a otro paciente y darle las primeras atenciones mientras se desocupa alguna cama.
Esta no es la descripción de una película de terror, sino de un hospital a donde personas afectadas de diversos males van a buscar salud.
El personal sigue laborando en medio de condiciones inadecuadas. De dos ascensores que tiene el centro de salud, uno está dañado.

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Dayana Acosta
Periodista dominicana con maestría en Comunicación Corporativa y Gerencia Hospitalaria y Seguridad Social. Apasionada de la investigación y de contar historias con propósito.