Nueva York – Un segundo legislador del estado de Nueva York exigió respuestas a las autoridades días después de que The Associated Press revelara que un hombre discapacitado en un asilo estatal sufrió infestación de gusanos.
El paciente, Steven Wenger, de 41 años, presentaba gusanos caminando alrededor de un tubo que le ayuda a respirar en un asilo de propiedad estatal en Rome.
Wenger es incapaz de caminar, hablar o respirar sin ventilador desde un accidente automovilístico hace 26 años. El senador republicano Joseph Griffo, del distrito de Rome, escribió a las agencias estatales que cuidan a los discapacitados e investigan las denuncias de abuso y negligencia, para pedirles una explicación de lo ocurrido en esas instalaciones.
Griffo calificó el caso de «vergonzosamente reprensible» y «totalmente inaceptable». Exigió una revisión completa para prevenir incidentes similares.
El domingo, el asambleísta demócrata Anthony Brindisi, de Utica, pidió a los funcionarios federales de salud que investiguen.
El descubrimiento de las infestaciones de larvas de mosca en su garganta hizo que Wenger fuera llevado a una sala de urgencias. Los investigadores estatales determinaron que la infestación fue causada por días de negligencia, pero ningún cuidador fue castigado porque los funcionarios dijeron que no podían identificar a los culpables.
Si The Associated Press no hubiera obtenido una pista confidencial sobre el caso, es improbable que alguien fuera del asilo hubiera sabido algo al respecto.
Eso se debe a que en Nueva York y en la mayoría de los demás estados del país, los detalles de las investigaciones de abuso y negligencia en instituciones estatales para discapacitados, adictos y enfermos mentales casi nunca se hacen públicos, incluso con los nombres censurados, oscurecer o eliminados de parte de un texto por razones legales o de seguridad.
Como resultado, es más fácil comprobar el historial de salud de un restaurante de barrio que averiguar sobre vacíos de atención en instituciones estatales y casas hogar que la gente puede considerar para alojar a sus seres queridos para que reciban atención las 24 horas.
«Si se corrobora una queja, debería haber un informe bastante detallado… pero no se puede obtener esa información», lamentó Robyn Grant, directora de políticas públicas de la organización National Consumer Voice For Quality Long-Term Care (Voz Nacional del Consumidor por la Calidad de la Atención a Largo Plazo), un grupo defensor con sede en Washington.
