Los pescadores dominicanos detenidos en Bahamas reclaman el respaldo de las autoridades dominicanas.
PUERTO PLATA.- “Pasando las de Caín” se encuentran los 176 pescadores dominicanos que llevan meses presos en Bahamas tras ser detenidos por ingresar de manera furtiva a capturar pescados y mariscos en las aguas territoriales de ese archipiélago del Océano Atlántico, según denuncias de sus familiares.
Uno de los prevenidos mediante una nota de voz enviada a sus parientes, expresó que se están muriendo dentro de una angosta cárcel donde son mantenidos como sardinas enlatadas, en la cual se ven obligados a defecar en cubetas y orinar en potecitos plásticos, hasta el punto de que algunos han contraído tuberculosis.
Asimismo, aseguran que por las condiciones infrahumanas en las que se encuentran algunos han sufrido infartos en las precarias de la prisión donde purgan una pena judicial por pesca ilegal, razón por la cual hacen un llamado al gobernador de Puerto Plata, Iván Rivera, a la diputada Ginette Bournigal y al senador José Ignacio Paliza para que intervengan por ellos ante las autoridades de Bahamas.
Ante dicha situación, hoy en horas de la mañana familiares de los detenidos realizaron una protesta en la esquina de las calles Beller con 27 de febrero de esta ciudad, donde conminaron a los funcionarios gubernamentales a interceder ante las autoridades de las Bahamas para que por lo menos se respete la dignidad humana de los pescadores retenidos.
Indicaron que a pesar que los 172 ciudadanos dominicanos fueron atrapados pescado de forma ilegal en aguas de Bahamas, deben ser ayudados por las autoridades del Gobierno dominicano, más ahora que su estado de salud se encuentra desmejorado debido al grave hacinamiento en que son mantenidos donde solo reciben una ración de alimento al día y de mala calidad.
Se recuerda que el primer grupo de 47 pescadores fue detenido a bordo del barco “Ronnier”, pero tres semanas después otro conglomerados de 129 fueron apresados en los buques “Digna Rosa I”, “Chiky” y “Paul” embarcaciones que fueron confiscadas por la Fuerza Real de Defensa de Las Bahamas y sus tripulantes procesados en cortes de esa jurisdicción.
