SANTO DOMINGO.-¡Adiós al Inmenso! Se apagó la luz del baloncesto dominicano. Falleció Hugo Cabrera, el que la mayoría considera el más grande jugador de baloncesto quisqueyano de todos los tiempos.
El mismo que brilló en el baloncesto universitario de Estados Unidos y que luego vino al país a dar brillo a la selección nacional, deleitar a la afición y establecer un ante y después para los dominicanos en lo que al baloncesto se refiere.
El más completo, influyente y revolucionario atleta del aro y el balón que haya nacido jamás en República Dominicana. El que todos, incluso los rivales, querían ver jugar.
El que a su llegada al país a principio de la década de 1970 cambió la forma de jugar y pensar de la inmensa mayoría de jóvenes que entonces trillaban carrera en el baloncesto.
El que llenaba de bote en bote el Palacio de los Deportes Virgilio Travieso Soto sin importar el día o la noche. El gran ganador, líder natural en cancha, el más aglutinador. Aquel que comandó la selección nacional a conquistar el primer oro para el país en Centrobásket 1977 en Panamá, evento donde fue seleccionado el Jugador Más Valioso.
También aquel espigado joven deseado incluso por los más famosos equipos de las ligas europeas, primer jugador de East Texas State University drafteado y convocado en más de una ocasión a campamentos de equipos de la NBA.
El mismo que en algún momento fue considerado el mejor jugador de América Latina. Aquel, que pese a sus increíbles habilidades para anotar, no era nada egoísta, pues hacía lucir a sus compañeros con elegantes pases.
En fin, un espectáculo verlo accionar en la duela. Líderes políticos, entre ellos el expresidente Leonel Fernández, así como el actual ministro de Deportes, Francisco Camacho, y el exministro Felipe-Jay-Payano, manifestaron su pesar por el deceso de Cabrera y coincidieron en que el país ha perdido a una de las grandes figuras del deporte.
Compañeros
Iván Mieses, exestelar jugador, miembro del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano y compañero de Cabrera en el equipo nacional, considera a Hugo como el mejor jugador dominicano de todos los tiempos, sobre todo en los 70 y 80 que fue cuando vio acción, a pesar de que terminó su carrera en 1991 y 1992.
Un líder
— Ídolo de Maíta
Otro que expresó su pesar por la partida de Cabrera es el ex armador José-Maíta-Mercedes, quien confiesa que éste fue siempre su ídolo y gran orientador dentro y fuera de la cancha, “un gran orientador de los jóvenes”.