Dimaggio Abreu.
La temporada regular de las Grandes Ligas ha terminado para dar paso a una larga postemporada que mostrará a su campeón de 2023 en los primeros días de noviembre. Mientras tanto, la temperatura para el torneo invernal dominicano 2023-24 se acelera con alguna trivialidad y los equipos arrojan visos de lo interesante que sería la contienda.
Con los seis equipos en prácticas, el presidente de las Águilas Víctor García Sued sacudió el ambiente con acusación al capitán del equipo archirrival, Emilio Bonifacio, de utilizar un bate negro adulterado.
Una acusación de ese tipo parece extemporánea, porque en el apogeo de lo que todo el mundo murmuraba como recurrente práctica, la LIDOM echó agua fría a cualquier investigación, imponiendo el depósito de una fianza de 100 mil pesos por abrir un bate sujeto a revisión. Hoy, por las redes aparecen ‘podcast’ de Luis Polonia admitiendo con plena seguridad el uso generalizado de bates ilegales. Entonces, ¿tal práctica había perimido?
Ya se sabe que Bonifacio ha intimado a García Sued a retractarse o de lo contrario procedería judicialmente.
Como si se tratara de una secuela de la acusación de su presidente, sorprende que las Águilas anunciaran sus partidos de pretemporada y no incluyera enfrentamientos con los Tigres del Licey, cuando por muchos años fueron recurrentes las visitas recíprocas entre ellos. En particular, el juego correspondiente a Santiago ha sido a beneficio del Club Rotario, pero esta vez el rival que anuncian los amarillos es Estrellas Orientales, el miércoles 11. Ojalá que la contrariedad quede a nivel de oficinas.
Las Estrellas de Manny García como gerente se montan en la ola de armar una rotación en base a zurdos. Ya anunciaron al panameño Andy Otero, al cubano Julio Robaina y al “gringo” Río Gómez. Alternarían con el diestro Domingo Acevedo con algún otro. Es un aviso con tiempo para aquellos que acusan vulnerabilidad contra pitcheo zurdo. ¡Atención Capital!
En el primer envite este año de la Agencia Libre en la pelota autóctona, no pocos se mostraron escépticos con el supuesto debilitamiento de Estrellas y Gigantes del Cibao, que perdieron mucho personal y adquirieron poco. A tales criterios no dimos mayor relevancia, puesto que cada club tiene un centenar de jugadores como reservas y no es verdad que entre 50 o 60 que estén disponibles no podrán colocar un conjunto competitivo en el terreno, con tanto talento criollo más 10 importados.
En este punto, los Gigantes dan paso al frente en despejar la incógnita al contar temprano en prácticas con jugadores de la talla del capitán Hanser Alberto, Kevin Gutiérrez, el retorno de Leury García, Moisés Sierra, Carlos Peguero, que forman un núcleo duro junto al importado cubano Henry Urrutia que es como de la casa, respaldados por un grupo con experiencia (Iván Castillo, Carlos Franco, Richard Ureña, Seuly Matías) y algunos más jóvenes que podrían tapar huecos.
La contienda invernal inicia el jueves 19 de este mes y coincidirá por unas dos semanas con la postemporada de Grandes Ligas. Para entonces se verá si Estrellas y Gigantes gravitan de igual con los demás o tendrán un arranque rezagado.
