METAIRIE, LUISIANA .- Zion Williamson y su familia, el fin de semana se encontraron con el aplauso y el tradicional jazz de Nueva Orleáns, mientras caminaban para ingresar a la sede de los Pelicans.
El gimnasio estaba atestado de empleados y ejecutivos del equipo ansiosos por darle la bienvenida al jugador que ha infundido en la franquicia un augurio mucho mayor del que parecía tener cuando Anthony Davis, seis veces seleccionado al Juego de Estrellas, solicitó un canje hace cinco meses.