SANTO DOMINGO.-El es un tipo tranquilo, que en el año 1993 salió de su tierra natal (Islas Canarias) a Madrid en busca de una oportunidad como artista.
Lo acogió un pequeño bar ubicado en la calle Libertad número ocho, allí nacieron sus primeras canciones y les dio vida a otras que solía escuchar en la voz de su padre.
Así lo contó la noche del sábado en su concierto en el Teatro Nacional el inmenso Pedro Guerra, quien se ganó a pulso la antorcha del relevo de la nueva trova.
Sentado a media luz, vestido casi de negro y con una botella de agua al lado, el cantautor se adueñó del público dominicano que una vez más le dejó saber su admiración y cariño.
“Biografía” fue su primer tema, y de ahí en adelante no pararon los éxitos que vienen incluidos en esta gira que lo trajo de nuevo al país: “Golosinas”.
Dos horas y algo de concierto entregó Guerra, quien entre poesía, música y humor volvió a encantar a sus fanáticos, que no dejaron un momento de gritarle nombres de sus canciones más conocidas.
“Hoy será un concierto único e irrepetible, aquí estaré para cantar las canciones que el público me ha pedido por Instagram, pero como son tantas creo que haré las que me dé las ganas”, decía el artista que ya va viendo su cabeza llenarse de canas y que jocosamente le saca partido a todas sus situaciones.
Una guitarra y una iluminación que le dieron el toque mágico a una intimidad entre el artista y su público era la escena, y sin mucho esfuerzo siguieron temas como “Deseo”, “Hazlos reír”, “Cuando Pedro llegó” y “Daniela”, entre otras.
Una nostalgia abrazó el Teatro y entonces ,en una voz suave y melodiosa, apareció “Cinco mil años”, un tema que impacta el alma de cualquiera y llena de recuerdos a todos aquellos que viven un amor como el de Pedro Guerra y María, a quien le escribió ese tema.
Su voz
— Talento joven
Este concierto organizado por la empresa Bigstar Live, tuvo como contraparte a Sergio Echenique, de voz suave y melodiosa, que cantó cuatro temas que fueron bien recibidos por el público.