La inclinación sexual al abuso de menores de edad es un tema delicado dada la temprana edad de iniciación sexual en nuestro país.
Según la USAID, 14% de las niñas y 21% de los niños han tenido relaciones con penetración antes de cumplir 15 años.
El porcentaje se dispara antes de cumplir 18, todavía menores de edad, a 51% en hembras y 70% en varones. Procuré la estadística al ver un candidato a alcalde por Santo Domingo Este, Julio Romero, hablando del escándalo de hace 14 años cuando embarazó a una niña, estando él casado, cuya víctima lo denunció.
Romero justifica el apoyo de la Fuerza del Pueblo (fue expulsado por el PRD) alegando que su familia lo perdonó. Hizo una vergonzosa defensa de su inmoral ilícito que cree excusable por haber transado en aquel momento su sometimiento judicial. Ciertamente un hecho, si fuera aislado, no define a nadie.
Sí lo definen, en cambio, su actitud, su avilantez al pretender que la transacción con su víctima fue con la sociedad y que quizás acertadamente cree (y Leonel también) que los votantes podrían favorecerlo.