Ginebra.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado una guía para intentar ayudar a los distintos gobiernos a decidir qué medidas tomar para hacer frente al coronavirus causante del COVID-19.
Sus objetivos son frenar la extensión de la pandemia, facilitar el cuidado de los pacientes, especialmente los que están en estado más grave; y minimizar el impacto del COVID-19 en el sistema sanitario, los servicios sociales y las economía nacionales.
A todos los países, tengan casos o no, les recomienda lo siguiente:
– Promover en la sociedad medidas de higiene (lavado de manos frecuente, taparse con el brazo al toser y estornudar) y distanciamiento social (evitar muchedumbres, no tocarse al saludar).
– Comunicación activa con la opinión pública sobre los riesgos de la enfermedad.
– Formar al personal médico en control de infecciones.
A continuación, la OMS da recomendaciones diferentes según el nivel de gravedad en que se encuentre cada país, divididos en cuatro posibles escenarios (cada nuevo escenario incluye tomar en cuenta las sugerencias de todos los anteriores).
1-Países u otros territorios sin casos diagnosticados
– Preparar equipamiento para poder realizar pruebas de diagnóstico de COVID-19, y comenzarlas si hay contactos con casos positivos de otros países o personas que muestren síntomas en consultas médicas de atención a enfermedades respiratorias.
– Acondicionar los hospitales para un posible aumento de la demanda de atención médica, lo que incluye abastecerse de sistemas de respiración asistida y equipamiento de protección (mascarillas, guantes, trajes protectores, etc).
– Promover que las personas con síntomas moderados de enfermedades respiratorias se autoaíslen.
2- Países con casos esporádicos
– Tratar a los pacientes y comenzar el desarrollo de procedimientos de triaje (clasificar a los pacientes de acuerdo con el nivel de prioridad con el que deben ser tratados en caso de una futura saturación de la red de atención médica).
– Aumentar las pruebas de diagnóstico de COVID-19.
3- Países con varios focos de contagio
– Intensificar la búsqueda de casos, la vigilancia de los contactos de los pacientes positivos, las cuarentenas, y el aislamiento de los casos.
– Ampliar los procedimientos de triaje y activar los planes de respuesta de las instalaciones sanitarias ante el aumento de pacientes. Aplazar los tratamientos menos urgentes ajenos al COVID-19.
– Designar hospitales de referencia para la atención de los afectados por el coronavirus.
– Aconsejar a los pacientes con casos no graves que se queden en casa, y poner en marcha sistemas de atención para los pacientes de grupos de alto riesgo (ancianos, personas con enfermedades respiratorias crónicas, etc).
– Poner en marcha sistemas de aislamiento de individuos que muestren primeros síntomas.
4- Países con transmisión comunitaria (alto número de casos)
– Aumentar la búsqueda de contagios con personal especializado en diagnosticar, tratar y reportar casos.
– Si la capacidad de diagnóstico está saturada por el alto número de casos, dar prioridad a los grupos más vulnerables y a las instalaciones sanitarias.
– Activar los procedimientos de triaje, y en caso de saturación de los centros médicos dar prioridad a los casos de mayor riesgo.
– Imponer el autoaislamiento a los individuos con síntomas.